Ricky y Love desarbolan a los Pacers

Los Wolves lo tienen muy difícil para engancharse al tren de los playoffs pero, de rendir como lo han hecho en los dos últimos partidos, todavía pueden conseguirlo. Si antes del parón del All Star arrollaron a Denver (117-90), en su regreso vencieron con autoridad a Indiana (104-91, el líder de la Conferencia Este.

Curiosamente, en ambos partidos los Wolves sufrieron las bajas de dos titulares, Kevin Martin y Pekovic. Y en el partido ante los Pacers también perdieron a Turiaf que en la segunda parte se lesionó en la rodilla derecha. El dúo formado por Kevin Love y Ricky Rubio martirizó a los Pacers, que posiblemente acusaron el cansancio ya que solo un día antes habían disputado otro partido, el que ganaron a Atlanta (108-98).

Los Wolves empezaron el partido a toda máquina y los Pacers no consiguieron en ningún momento darles una respuesta. Los de Adelman llegaron a dominar por 20 puntos y fueron siempre por delante en el marcador. Kevin Love sumó 42 puntos y 16 rebotes. Ricky Rubio repartió 17 asistencias, superó su récord personal e igualó el de la franquicia. Llevó el ritmo del juego y solo perdió dos balones, los mismos que recuperó, además de capturar 7 rebotes.

La actuación del base español quedó oscurecida porque volvió a consumar una pobrísima estadística en el tiro con 6 puntos y una serie de 2 de 10 en tiros de campo. También falló más de lo habitual en los tiros libres, con un 2 de 6. Por los Pacers, Paul George, con 35 puntos y 11 rebotes, se quedó demasiado solo. Estuvieron especialmente desacertados los pívots, Hibbert, West, Mahinmi y Scola, aunque el argentino apenas estuvo 10 minutos en la cancha.

Blake recala en los Warriors

Steve Blake se va a Golden State que a cambio envía a MasShon Brooks y Kent Bazemore a los Lakers. Blake, de 33 años, lleva 11 temporadas en la NBA, las cuatro últimas en los Lakers por los que fichó en julio de 2010 como agente libre después de una breve etapa en los Clippers. Percibía 4 millones de dólares por temporada. Bazemore cobra esta temporada 789.000 dólares y Brooks, 1.2 millones.

Los Lakers, en una temporada en la que ya no tienen ninguna aspiración clasificatoria, se ahorrarían dos millones y los Warriors, que sí mantienen aspiraciones de llegar lejos en los playoffs se hacen con un jugador con experiencia en ellos como es Blake. Pese al cambio de equipo, Blake es un jugador del agrado de Mike D’Antoni, y no se descarta que el próximo verano pudiera regresar al equipo.

Si los Lakers logran traspasar en las pocas horas que quedan para que concluya el plazo a Hill y Kaman, quedarían por debajo de la tasa de lujo en la que se mueven ahora y no necesitarían desprenderse de Pau Gasol. Los Lakers han mantenido diversas negociaciones para traspasar al pívot español, pero, hasta ahora, ninguna de ellas ha llegado a buen puerto. Gasol sigue lesionado en la cadera y no jugó el partido que los Lakers perdieron ante Houston (108-134). Dwight Howard fue recibido con abucheos en el Staples Center y los Lakers solo pudieron contar con ocho jugadores para afrontar un partido dominado absolutamente por los Rockets.

Hubo más interés por el mercado de traspasos que por el juego. Los nuevos jugadores contratados por los Lakers son de perfil bajo. Bazemore es un escolta de 24 años que cumple su segunda temporada en la NBA, procedente de la Universidad de Carolina del Norte. En los 105 partidos que suma en sus dos temporadas ha disputado 105 partidos siempre saliendo desde el banquillo y ha promediado 2.1 puntos, 0.6 rebotes y 0.4 asistencias.

Brooks es un escolta de 25 años que ha jugado en cinco equipos diferentes en los tres años que lleva en la NBA y que esta temporada empezó en Boston y prosiguió en Golden State. Con los Celtics promedió 3.1 puntos, 1.4 rebotes, 0.4 asistencias y 7 minutos en los 10 partidos que disputó. Con los Warriors jugó 7 partidos en los que promedió 1.9 puntos, 0.7 rebotes y ninguna asistencia.

Vuelve Claver

Víctor Claver por fin volvió a jugar unos minutos en el partido que Portland perdió ante los Spurs (109-111). El ala-pívot español solo había jugado cuatro minutos esta temporada repartidos en tres partidos, el último, el 15 de noviembre. Las lesiones de Freeland, Leonard y Aldridge le vuelven a abrir la posibilidad de entrar en las rotaciones del entrenador de los Blazers, Terry Stotts.