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El misterio de Plushenko

El divo del patinaje dice estar como nunca y se postula para participar en el individual

A. I.
El ruso Plushenko, en uno de sus ejercicios
El ruso Plushenko, en uno de sus ejerciciosadrian dennis (AFP)

El mismo día que el madrileño Javier Fernández probaba por primera vez la pista de hielo donde competirá el jueves y el viernes para intentar lograr la primera medalla española en unos Juegos de Invierno desde 1992, seguían en Sochi, su territorio, las cábalas sobre Evgeny Plushenko. El divo ruso, campeón olímpico de patinaje artístico en Turín 2006 y plata en Salt Lake City 2002 y Vancouver 2010, fue una de las claves del triunfo de Rusia por equipos el domingo, el primer oro patrio en Sochi, y como tal se reivindica. Por eso dice que quiere patinar en la prueba individual.

A favor de El Zar está una carrera repleta de éxitos y los años de experiencia en la gran competición

Lo dijo nada más terminar la competición. “Voy a competir. Quiero patinar e intentaré dos cuádruples giros”, aseguró todavía eufórico por la victoria y porque había sido el mejor en el programa libre y restando importancia a sus crónicos dolores de espalda. Aunque este resultado es engañoso porque faltaban casi todos los candidatos al título individual (no solo Fernández, también Hanyu, Chan…) a Plushenko le basta.

La decisión, que ya está tomada aunque no se ha hecho oficial, no es fácil para los directivos rusos. La desastrosa actuación de sus patinadores en el último mundial, en el que Javier Fernández logró el bronce, solo les ha dado derecho a un billete olímpico para la competición individual masculina. El destinatario parecía ser Maxim Kovtum, que fracasó estrepitosamente en el Mundial (17º) pero ha ganado el título nacional este mismo año.

Las dudas, sin embargo, resurgieron tras los Europeos de enero (donde el español ganó su segundo título consecutivo). Kovtum solo pudo ser quinto y Plushenko, que ni siquiera compitió en esa cita, volvió a salir a escena. A los 31 años, se ofreció para rescatar el honor perdido.

A favor de El Zar está una carrera repleta de éxitos, los años de experiencia en la gran competición, de aprender a dominar los nervios y sobreponerse a la presión y un increíble palmarés que incluye siete títulos europeos y tres mundiales.

La inconsistencia del joven Kovtum en competición tampoco le va mal. En su contra cuenta un cuerpo machacado por las lesiones y un programa al que, dicen los entendidos, le falta dificultad para llegar a lo más alto. Aunque ha prometido más dificultad en el concurso individual, el domingo consiguió 168,2 puntos en el programa libre. Javier Fernández logró en los Europeos 186,07 y Chan y Hanyu han logrado notas superiores esta temporada.

A falta de comunicación oficial, lo que sí que se sabe es que Plushenko tiene intención de entrenarse hoy en la misma pista que probó ayer el español. El jueves, la solución.

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Sobre la firma

A. I.
Redactora jefa de Fin de Semana desde 2017. Antes estuvo al frente de la sección de Deportes y fue redactora de Sociedad y de Negocios. Está especializada en gimnasia y ha cubierto para EL PAÍS dos Juegos Olímpicos y varios europeos y mundiales de atletismo. Es licenciada en Ciencias Políticas y tiene el Máster de periodismo de EL PAÍS.

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