El City aplasta al United a la española

El derbi de Manchester tuvo color azul y aromas de ajo. El City, con cinco jugadores procedentes de la Liga española (Zabaleta, Touré Yaya, Navas, Agüero, Negredo) y un solo inglés en el once inicial, el portero Hart, se zampó al United (4-1), que arrancó con seis ingleses en el campo y un español en la portería, De Gea. También en el banquillo las influencias ligueras, con el chileno Pellegrini (ex del Villarreal, Madrid y Málaga), se impusieron a la ortodoxia inglesa que representa Moyes, el sustituto de Ferguson.

La temporada acaba de empezar y la Premier está este año más abierta que nunca, con los tres favoritos (los dos de Manchester y el Chelsea) en transición y el buen arranque de dos grandes venidos a menos en los últimos años (Arsenal, líder junto al Tottenham, y Liverpool, líder hasta este fin de semana). Pero la apabullante victoria del City en este derbi suena a firme declaración de intenciones. No solo por el resultado, sino por las formas.

El dinero de los jeques solo ha dado hasta ahora un título liguero al City, ganado por los pelos. La llegada de Ferran Soriano a la gerencia y de Txiki Begiristain a la dirección deportiva, hace ya un año largo, parece marcar un cambio en su estrategia. El histriónico italiano Roberto Mancini nunca logró armar un equipo. Tampoco le ayudó la tendencia a fichar estrellas que hubo en esa primera etapa, que se abrió con la llegada de Robinho, un jugador espejismo.

Todo eso ha cambiado este año. En el banquillo ya no está Mancini, sino Pellegrini. Un hombre que no ha ganado nada pero que en España demostró su capacidad de armar equipos en un deporte cuyo nombre es Fútbol pero se apellida Asociación. Ya no están jugadores deslumbrantes pero erráticos, como Balloteli y Tévez. Para cubrirles han llegado futbolistas hambrientos de gloria y que saben jugar para los demás, como Navas, como Negredo, que se unen a otros que ya estaban, como el argentino Zabaleta y el belga Kompany, dos ejemplos de lo que aquí llaman work-ethic.

Esa ética de trabajo y ese fútbol de equipo quedó reflejado tras el primer gol ayer, cuando casi todo el City se abrazaba celebrándolo y Negredo llamaba a Nasri para que se incorporara al abrazo colectivo. Nasri ni había marcado: lo hizo Agüero con una bolea espectacular. Ni siquiera había dado la asistencia: había sido Kolarov. Pero sin el pase de Nasri, Kolarov no habría asistido y el Kun tampoco habría goleado.

El conjunto de Pellegrini desmontó a su vecino con una demostración de fútbol de equipo

El United se estuvo desangrando toda la primera mitad, incapaz de tapar a un Touré Yaya colosal. La puntilla, en el último minuto de la primera parte, tampoco habría llegado si Zabaleta no hubiera luchado para forzar córner de una pelota que parecía perdida. El saque de Nasri lo desvió Negredo y Yaya marcó con la rodilla.

Nada más arrancar la segunda parte, Negredo le ofreció al Kun el 3-0. Y, cuatro minutos después, Navas demostró que es uno de los mejores extremos del mundo con una galopada desde su propio medio campo que acabó con un centro mortífero que Nasri clavó de forma espectacular.

Casualidad o consecuencia, tres goles fueron obra de exjugadores de la Liga y el cuarto lo parió otro exjugador de la Liga. Con una treintena de españoles y otro buen puñado de jugadores que han pasado por la Liga, la Premier de este año se va a cocinar a la española. Con mucho aceite de oliva, mucho ajo y hasta una pizca de bicho para que pique un poco. Premier al ajillo.