Madrid y Juventus, mil batallas

Cuando al Real Madrid le salió la bola de su primer contrincante, pudo temerse lo peor. El Juventus es un hueso y cabía que Dortmund o Nápoles también cayeran en el grupo. No fue así, y los de Ancelotti se medirán con dos viejos conocidos, como el campeón italiano y Galatasaray. El Copenhague no tiene tradición.

» Juventus. Recién proclamado campeón de la Supercopa de Italia ante el Lazio, el Juventus de Antonio Conte sigue con la misma firmeza de los dos ejercicios anteriores, consolidado como el mejor equipo de Italia. Una fiabilidad sustentada en un esquema un tanto antiguo, 3-5-2, pero efectivo a tenor de los resultados. Resguardados por la honorable presencia de Buffon, los tres centrales (Bonucci, Barzagli y Chiellini), los mismos usados por Cesare Prandelli en la selección azzurra, permiten el vuelo de los carrileros Lichsteiner y Asamoah, que a su vez arropan a un medio del campo poderoso: Pirlo, Pogba (en lugar del lesionado en la rodilla Marchisio) y el chileno Vidal. Arriba, la habilidad de Vucinic y la furia de Tévez, que ya ha anotado dos goles. El Apache no es el mismo de hace unos años, ha perdido velocidad, pero su carácter indomable le permite ganarse el puesto del 9. En el banquillo queda Llorente, con dificultades para adaptarse a un juego tan dinámico como exige Conte a los arietes.

» Galatasaray. La veteranía define al Galatasaray desde el propio banquillo: Fatih Terim, de 59 años, compagina su trabajo en el Türk Arena con el mando de la selección turca. En el cuadro de Estambul, reciente campeón del doblete turco (Liga y Supercopa), dirige a un abigarrado grupo ensalzado por la presencia de las dos estrellas llegadas en enero pasado, el delantero Didier Drogba (35 años) y el centrocampista Wesley Sneijder (29). A ellos se une en el ataque Yilmaz, delantero turco de 28 años, la sorpresa en la pasada edición de la Liga de Campeones, con seis goles en 501 minutos de la primera fase, por delante de Cristiano Ronaldo, autor de los mismos tantos pero en 540 minutos. El punto débil del Galatasaray es su defensa, protegida en primera instancia por el meta uruguayo Muslera. El defensa marfileño Eboué y el español Albert Riera integran también una zaga a la que acude en ayuda el experimentado brasileño Felipe Melo, adquirido tras su cesión del Juventus por 3,7 millones. En la medular, junto a Sneijder, destaca Altintop, ex del Real Madrid, donde pasó sin pena ni gloria. El conjunto blanco ya jugó la temporada pasada en el Türk Telekom Arena, ante 52.000 espectadores, en los cuartos de final de la Champions, donde cayó 3-2.

» Copenhague. Para levantar el equipo, el Copenhague reclamó de urgencia la semana pasada al entrenador noruego Stale Solbakken, de 45 años, todo un personaje. Conocido en España por el careo con Pep Guardiola en un partido de Champions de 2010 en su anterior etapa en el conjunto de la capital danesa (Busquets hubo de separarlos). Tras una aventura poco afortunada en el Colonia alemán y el Wolverhampton inglés, Solbakken vuelve a Dinamarca, donde es muy respetado pese a su origen noruego. Los daneses se sienten dueños de una sensibilidad futbolística ajena a sus vecinos noruegos, de un estilo más primario. Ese menosprecio llega hasta del propio seleccionador danés, Morten Olsen. Pero Solbakken, con una propuesta que mezcla la contundencia defensiva escandinava con un toque danés más alegre, ha tendido un puente entre ambos países. En 2001, cuando era jugador del Copenhague, sufrió un ataque al corazón en un entrenamiento y fue dado por muerto clínicamente. Sobrevivió y ahora lleva un marcapasos. Fundado en 1992, el Copenhaguen es un club sin apenas historial y con un estadio, el Parken, para 41.752 espectadores. Su estrella está en el banquillo.