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La lista de Conchita

La seleccionadora española analiza a las candidatas al título en París

J. J. MATEO
Serena Williams, en París
Serena Williams, en ParísChristophe Ena (AP)

Fue una de las mejores analistas del planeta sobre la pista. Con un bisturí por raqueta, Conchita Martínez diseccionó rivales hasta celebrar un Wimbledon (1994), tres medallas olímpicas, una final de Roland Garros y otra del Abierto de Australia. La ex jugadora, que hoy es la seleccionadora española de tenis femenino y antes fue una competidora de fino sentido táctico, repasa para EL PAÍS las fortalezas y debilidades de las mejores tenistas en el cuadro de Roland Garros, que comienza este domingo.

SERENA WILLIAMS (Número uno mundial. 15 grandes). “Cuando está en forma es un pelín superior a las demás”, argumenta la española sobre la estadounidense, de 31 años, coronada en París en 2002 y derrotada a la primera en un grande por primera vez en su carrera en 2012. “Aunque llega superrodada (24 victorias seguidas y cuatro torneos celebrados), la tierra no es su superficie favorita, no es la pista en la que se siente más cómoda. Un grande es especial, requiere estar concentrada 15 días, estar enfocada 15 días. Eso influye”, añade. “Igual, este año es diferente para ella: tiene piso en París y se entrena bastante en la ciudad con la Academia Mouratoglou. Ya con el saque, cambiando muy bien de direcciones, utilizando también el abierto y la potencia, porque dispara a 201 o 205 kilómetros por hora, suma muchísimo. De fondo, cuando se mueve bien y llega por detrás de la pelota, la mueve muy bien y con gran potencia. Revés paralelo buenísimo”.

Sharapova, en 2013.
Sharapova, en 2013.ALEJANDRO RUESGA

MARIA SHARAPOVA (Número dos mundial. Cuatro grandes). “Al lado de la derecha, le cuesta más”, explica Conchita sobre la campeona de 2012 y su habilidad para deslizarse sobre arcilla, que le llevó a describirse como “una vaca sobre hielo”. “Al lado del revés llega deslizándose mejor. Pero le cuesta. Si coge la iniciativa, si pega esos dos o tres primeros tiros, el contrario va un poco de bólido, sin poder defender largo”, añade sobre la rusa, de 26 años. “Desde el fondo, su bola viene rápida, profunda e incómoda. Si la puedes mover, es otra cosa”. ¿Y si se cruza con Serena, que la ha vencido en los 12 últimos enfrentamientos? “Quizás salga como ante una montaña. Eso complica. Cuando ellas se cruzan ya llegan rodadas, porque es siempre en las rondas finales, y es difícil coger ahí a una Serena en un momento difícil. En cualquier caso, todo puede pasar: ahí está el ejemplo de la derrota de Serena ante Razzano en 2012”.

Azarenka, durante la final de Roma.
Azarenka, durante la final de Roma.ETTORE FERRARI (EFE)

VICTORIA AZARENKA (Número tres mundial. Dos grandes). “Es una gran jugadora que lleva la iniciativa y que también sabe defenderse”, describe la ex campeona de Wimbledon sobre la arisca bielorrusa, de 23 años. “Ha mejorado mucho en ese aspecto: pegar con potencia, saber el porqué de sus golpes, defenderse agresivamente. Me gusta su tenis. Con Serena tiene dificultades. Es, además, una tenista trabajadora”, cierra sobre la doble campeona del Abierto de Australia, que ya llegó al número uno mundial y que ha penado a mediados de temporada por un problema de tobillo.

Errani, en Roma.
Errani, en Roma.TIZIANA FABI (AFP)

LAS TAPADAS. “Radwanska es un nombre que no se escucha tanto, pero lleva años siendo regular, en cuartos y en semifinales”, argumenta Conchita. “Na Li (campeona en 2011) podría estar en la lista, con Kerber, Stosur y Errani. La italiana es una tenista muy consistente. En todas las superficies, pero especialmente en tierra, hace jugar puntos muy largos. Si las favoritas tienen un mal día, puede dar la sorpresa”, resume la española sobre la finalista de 2012.

LAS ESPAÑOLAS. “Carla Suárez es una buena baza en los grandes”, dice la seleccionadora, que también confía en las posibilidades de Lourdes Domínguez y Anabel Medina, además de seguir con gran interés la evolución de Silvia Soler y de las prometedoras Garbiñe Muguruza y Tita Torró. “Carla puede dar una alegría. Para eso tiene que jugar un tenis muy estable, serio. Ser agresiva y también hacer daño con la variedad de altura y efectos, porque tiene golpes para eso. Ese debería ser su punto fuerte: mentalidad seria, sin irse del partido, porque si se va su tenis baja mucho”, describe la entrenadora sobre la tenista de 24 años, cuartofinalista en Roland Garros 2008 y el Abierto de Australia 2009. “Su hándicap es la continuidad, hacer todo lo que toca durante un partido entero, encontrar el mayor tiempo posible la continuidad. Cuando se pone de derecha y se mueve con rapidez, hace daño. De estilo, su revés es muy bueno, pero cuantas más pelotas pueda tocar con la derecha, mejor”.

Conchita Martínez, con Carla Suárez, en 2009.
Conchita Martínez, con Carla Suárez, en 2009.ULY MARTÍN

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Sobre la firma

J. J. MATEO
Es redactor de la sección de Madrid y está especializado en información política. Trabaja en el EL PAÍS desde 2005. Es licenciado en Historia por la Universidad Complutense de Madrid y Máster en Periodismo por la Escuela UAM / EL PAÍS.

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