El PSG, campeón de los excesos
El club parisino conquista su tercera Liga y la primera desde la llegada de los inversores cataríes Ibrahimovic, con 27 goles, logra un récord de 10 ligas en seis equipos y se pelea con Leonardo
Dos años después de invertir 250 millones en fichajes, el PSG ha cosechado su primer título, la Liga francesa, la tercera en los 43 años de historia del club parisino tras las de 1986 y 1994. Ganó anoche al Olympique en el estadio Gerland de Lyón (0-1, Ménez, m. 53), aunque le ha costado en este final de campeonato, atacado por los nervios en las últimas jornadas: el empujón al árbitro de su director deportivo, Leonardo de Araujo, tras empatar con el Valenciennes y sufrir la roja de Tiago Silva (1-1), y las expulsiones la semana anterior ante el Evian de Sirigu, Verratti e incluso Beckham, recién cumplidos los 38 años. Anoche, para no desentonar, Ibrahimovic se peleó con Leonardo en la caseta, mientras celebraban el título. "Siempre tienes que estropearlo todo", le soltó el atacante sueco al exentrenador del Milan.
Aun así, la superioridad del PSG a lo largo de la temporada ha sido manifiesta, el equipo más goleador (63) y el menos franqueado (21). El equilibrio característico de su entrenador, Carlo Ancelotti, de 53 años, que suma su tercera Liga en tres países distintos: una con el Milan en Italia (2004), una con el Chelsea en Inglaterra (2010) y la tercera esta. A punto de aceptar la propuesta de probar en España con el Real Madrid.
Pese al calor del dinero, el PSG no consigue retener a sus figuras. Esa potencia financiera de su propietario, el Qatar Investment Authority, el fondo de inversión de los excedentes del gas y el petróleo del gobierno catarí, contrasta con la falta de tradición futbolística parisina comparada con otras Ligas. Quiere marcharse Ancelotti y también Ibrahimovic, 31 años, protagonista de principio a fin del éxito del PSG, máximo goleador de la competición (27) y propietario de un registro excepcional. Ha sido campeón de Liga 10 veces en 12 años, en seis conjuntos diferentes y cuatro países: Ajax (2001-02 y 2003-04), Juventus (desde 2004 a 2006), Inter (desde 2006 a 2009), el Barça (2009-10), el Milan (2010-11) y el PSG.
“Entre tres o cuatro años estaremos a la altura de los mejores”, ha anunciado el jeque Nasser Al-Kelaïfi, dueño de la entidad, tras haber comprado a Lucas Moura (43), Pastore (42 millones), Thiago Silva (42), Lavezzi (26), Ibrahimovic (21) y Verratti (11). El último fichaje, el de Beckham en el pasado mercado invernal, fue más un intento de abrir los mercados asiáticos, donde el volante inglés tiene un gran tirón comercial. Su fútbol está para muy poco.
El gol de Ménes en el estadio Gerland ante el Lyón le da el títutlo
Capitán casi desde su llegada, el central brasileño Thiago Silva sí ha supuesto un salto de calidad en la defensa del PSG, acompañado por su compatriota Alex en el centro de la zaga. Verratti, el joven procedente del Pescara, podría considerarse la revelación, aunque ya venía precedido de consideración en la selección azzurrra como mediocentro con nervio y buen pase. Otra joven promesa, el brasileño Lucas Moura, apenas ha empezado a justificar la enormidad pagada por él al São Paulo, sobre todo en algunos partidos de la Liga de Campeones: velocidad y fortaleza en la conducción del balón. Pero mucho por recorrer. Lavezzi ya era un valor seguro cuando llegó del Nápoles, en la media de sus cifras italianas (11 goles en 38 partidos); mientras Pastore, el elegante media punta argentino, ha confirmado su intermitencia interminable (8 asistencias y nueve goles). Cifras comparables con mucho menos nombre, el volante Ménez (siete tantos y 11 pases de gol), fichado del Roma en 2011 por ocho millones, el héroe de la noche en Lyón.
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