Lendoiro y las verdades del “barquero”

Hundido en el fango económico, inmerso en un procedimiento concursal que pone en entredicho el futuro del club que debe más de 156 millones de euros, Augusto César Lendoiro se revuelve contra las insinuaciones que circulan en torno al partido que enfrentó el 13 de abril a Levante y Deportivo. No hay certezas y sí conversaciones a media voz que atraviesan la Península. Y en A Coruña clama Lendoiro para defender el honor de su equipo. “No hay derecho. Estamos absolutamente indignados, esperando que se produzca una rectificación y unas disculpas de Barkero no solo hacia nuestro club, sino también hacia sus compañeros futbolistas del Deportivo”, reclama el presidente del club gallego, que, en todo caso, no descarta acciones legales.

He intentado hablar con Javier Tebas [el nuevo presidente de la LFP] sobre este asunto, pero no he podido”

Lendoiro quiere que se arroje luz sobre este asunto, reclama datos y no los tiene, ni siquiera por parte de la Liga de Fútbol Profesional, que ha iniciado una investigación propia y ha trasladado a la Fiscalía Anticorrupción las declaraciones del futbolista del Levante, Javier Barkero, sobre un posible amaño en el duelo disputado en campo valenciano. “He intentado hablar con Javier Tebas [el nuevo presidente de la LFP] sobre este asunto, pero no he podido”, confesó Lendoiro a última hora de la tarde de ayer antes de recordar como hace dos años el Deportivo se fue de manera inesperada a Segunda División tras una concatenación de resultados desfavorables en partidos disputados por rivales directos o incluso entre ellos. “Entonces todos sabíamos lo que iba a pasar y después sucedió exactamente lo que aguardábamos. Pero como no había pruebas nos callamos”. Esa prudencia para abocarse a los hechos antes de señalar es lo que echa de menos Lendoiro. “No sé si hubo comprotamientos deshonestos por parte de futbolistas del Levante, lo que aseguro es que el Deportivo no sabe nada de este asunto y nos hemos visto metidos en medio porque se nos acusa de forma velada”.

Ocupado en lo deportivo, donde el equipo disputa esta noche un decisivo partido en Riazor contra el Atlético, y en lo institucional, donde matiza que el procedimiento concursal es “un partido sin segunda vuelta y que hay que jugar muy bien”, Lendoiro atina, en fin, a encontrar un giro de retranca para dejar una sentencia: “Lo que está claro es que no podemos hablar de las verdades del barquero”.