España, contra Ucrania por la permanencia

Será sobre tierra batida y en España. Entre el 13 y el 15 de septiembre, la selección luchará contra Ucrania y por primera vez desde 2006 por no descender del Grupo Mundial de la Copa Davis, que es el que distingue a las mejores selecciones del planeta. Así lo ha decidido el sorteo realizado hoy, que deja al equipo más brillante del siglo XXI (cinco títulos y otras dos finales) pendiente tanto de la lista rival como de la propia: el panorama será radicalmente distinto si Rafael Nadal, 11 veces campeón de torneos del Grand Slam, y David Ferrer, el número cuatro, se alistan, como es su intención. Tras perder la final de 2012 contra la República Checa (el mallorquín no jugó por lesión), ninguno de los dos tenistas quiere ver a España en Segunda división.

“Desde que he sido capitán, nunca he tenido la suerte de poder contar con Rafa y ojalá que pueda ser ahora”, dijo en los días previos Àlex Corretja, el seleccionador, que vio cómo su equipo se inclinaba en primera ronda contra Canadá (3-1). “Creo que Rafa ha disipado todas las dudas en los cuatro torneos que ha jugado este año y eso ha sido lo más importante ver que su rodilla responde”, continuó sobre la lesión que tuvo al exnúmero uno apartado siete meses de las pistas. “Creo que está jugando más suelto y con una visibilidad muy buena que le permite dominar mucho más los puntos”.

Ucrania, que nunca ha competido en el Grupo Mundial, cuenta con un tenista estimable e impredecible, Alexandr The Dog Dolgopolov. El número 22 del planeta es uno de los favoritos de los aficionados: la anarquía de su tenis, repleto de jugadas inesperadas y rebosante de contraataques y dejadas, convierte sus partidos en un tiovivo que asegura emociones fuertes. Acompañado por otro tenista que ha hecho del vértigo su tarjeta de presentación, Stakhovsky, los ucranianos serían un auténtico peligro en pista rápida, pero sufrirán sobre arcilla, donde España no se ha caído como local en lo que va de siglo (la última derrota fue contra el Brasil de Guga Kuerten, en 1999).