“No es mi estilo señalar a nadie”
Ramos responde sin citarlo a Mourinho, que le ha culpado públicamente de errores puntuales durante toda la temporada, el último el del pasado miércoles ante el Manchester
Pocas veces a lo largo de la historia los capitanes del Madrid han jugado bajo mayor presión que en esta temporada. A las exigencias lógicas de una posición que les sitúa en el centro de las expectativas deportivas, los representantes de la plantilla ahora suman sobre sus hombros las demandas agobiadas de su presidente, Florentino Pérez, que les pide que consigan títulos autogestionándose si es preciso, como si el mánager, José Mourinho, fuese una figura decorativa y no lo que de verdad es: el hombre con más poder del club. Lesionado Casillas, ahora la tensión se concentra en Sergio Ramos. El segundo capitán sabe que Mourinho le observa con desconfianza desde que comenzó la temporada. Prueba de ello fue la acusación que le hizo tras el partido con el Manchester, señalándole por no haber impedido el gol de Welbeck. El asunto dejó otra herida en la convivencia del vestuario, como se desprendió de las palabras de Ramos tras abandonar el estadio ayer.
“Cada uno es libre de opinar lo que quiera”, dijo el sevillano. “Mi educación y mi estilo no me permiten señalar a nadie, y mucho menos cuando se trata de un compañero que ha cometido un error. No es momento para polémicas. Vienen partidos muy importantes en los que nos vamos a jugar las dos competiciones en las que tenemos más posibilidades y ahora tenemos que estar más unidos que nunca. Nos jugamos la temporada y eso es lo primordial. No me ha dicho nada [sobre los errores]. Mi valoración personal me la guardo”.
La posición en la que me siento más cómodo es la de central” Sergio Ramos
Al deseo de Mourinho de desplazar a Ramos del eje de la defensa se ha sumado el fenomenal estado de forma de Varane. Ayer, la baja de Arbeloa por sanción, colocó a Ramos en el lateral derecho y en el aire circuló la cuestión del millón. ¿Le dejará Mourinho allí cuando regrese Arbeloa? “Esa es una pregunta para el míster”, respondió Ramos, marcando la raya. “Está claro que en los últimos años yo me he encontrado muy bien jugando como central. Y en situaciones puntuales, por una baja de un compañero como es el caso ahora, no tengo ningún inconveniente en jugar como lateral. Yo estoy para cumplir y dar el máximo donde me mande el entrenador. Pero la posición en la que me siento más cómodo es como central”.
Ramos lamentó que el árbitro Paradas Romero le expulsara tras mostrarle una primera amarilla que le resultó incomprensiblemente desproporcionada. “Estoy dolido por la expulsión”, dijo. “Ya no sé cómo actuar. Como árbitro hay que saber interpretar, tener claros los criterios. No es normal lo que ha pasado conmigo. No soy un jugador que haga entradas duras, ni que vaya con maldad. Me sabe mal por haber dejado a mis compañeros en inferioridad en el minuto 15 del partido. Mi primera tarjeta es totalmente injusta y no se puede dejar a un equipo con diez por eso. Es muy fácil expulsar a Sergio Ramos. No sé si es por los antecedentes o por el cartel que tengo. Para mí es preocupante. Yo he jugado Eurocopas, Mundiales y Champions y en esos partidos yo nunca he tenido esos problemas. En España es diferente·.
Aitor Karanka, el auxiliar de Mourinho, también lamentó la roja a Ramos: “No nos sorprende nada.... Ha sido una pena por el partido en sí. Estaba siendo un partido bonito para el espectador, con un Rayo que estaba demostrando el atrevimiento que tiene con su juego alegre… Se preveía un partido muy bonito y no ha podido ser”.
Pocas veces los capitanes del Madrid han jugado bajo tanta presión
Le preguntaron a Karanka por la no convocatoria de Benzema y su réplica resultó de lo más significativa: “Se pretende que la gente que esté en el banquillo cuando salga pueda aportar… Y en el caso de Morata todo el mundo pide gente de la casa, de la cantera”.
El entrenador del Rayo, Paco Jémez, se quejó de la falta de predisposición de sus jugadores a la hora de desbordar: “Nos ha costado responsabilizarnos en la última parte del campo. Llegábamos a situaciones de uno contra uno y en lugar regatear para intentar tirar a puerta se la dábamos a otro compañero para que lo hiciera él (…). No me ha gustado cómo hemos jugado porque nos ha faltado ese atrevimiento. Creo que frente a un Madrid que se quedó con uno menos debimos generar muchas más ocasiones de gol y no lo hicimos”.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.