En las manos de Valdés
El portero del Barça mantendrá la titularidad tras anunciar que no renovará su contrato
Uno de los vínculos aparentemente más sólidos del barcelonismo tiene fecha de de caducidad: 2014. Víctor Valdés ha anunciado que no renovará su contrato con el Barça. Una decisión insospechada y desconcertante. Hasta ahora se sostenía que el uno estaba hecho para el otro, como si fueran un matrimonio de por vida, imposible de romper: el equipo no podía tener mejor portero y Valdés jamás encontraría un club más adecuado. A diferencia de ocasiones anteriores, cuando se negociaron renovaciones como la de 2009, no se prevé la marcha atrás. La decisión es “pensada e irrevocable”, de manera que a partir de hoy se trata de saber gestionar los 17 meses que quedan hasta la partida del arquero. El entrenador ya ha anunciado que Valdés seguirá siendo titular.
No se sabe muy bien qué pretende Valdés, que ha actuado de forma unilateral y seguramente a destiempo, sin dar margen de respuesta a la institución. El portero siempre fue un personaje difícil, muy pasional, tan decisivo en el campo como complejo en sus relaciones fuera de la cancha. A veces ha dado la sensación de que se siente víctima de un cierto desafecto porque sus méritos no han sido reconocidos en premios, ni en salarios y menos en cariño. “Siempre se ha dudado de mí”, anunció en su última comparecencia, la misma en que también expresó su voluntad de conocer “nuevas culturas”. A bote pronto pareció una bravata y desde el club se aseguraba que el asunto estaba encaminado y no habría problemas para prorrogar el acuerdo. No ha sido el caso.
José Manuel Valdés y Ginés Carvajal, el padre y el agente de Valdés, no dejaron ni abrir la boca al vicepresidente Josep Maria Bartomeu, al director deportivo Andoni Zubizarreta y al director de fútbol Raúl Sanllehí, cuando el jueves se citaron por vez primera en la ciudad deportiva del Barça. Aseguran personas de su entorno que Valdés no pretende echar ningún pulso a la entidad sino que con su actitud quiere evitar que se especule en el futuro con su contrato y posibles ofertas. No habría ningún chantaje ni afrenta, como cuando se negó a jugar en el filial con Van Gaal, sino que es una decisión firme que comunica con tiempo para que el club pueda organizarse y dar con un sustituto.
La cuestión se centra en saber gestionar los 17 meses que quedan hasta su partida
Aunque respeta su decisión profesional, la directiva del Barça no sabe muy bien en qué le ha fallado al internacional Valdés. Ha evitado fichar a un segundo meta que compitiera por su puesto —Pinto, cuyo acuerdo vence también en 2014, solo juega la Copa—, se ha escuchado su opinión en los distintos cambios de entrenador de porteros, y se disponía a ofrecerle un contrato hasta 2018. Hay quien sospecha que se molestó porque el club se aseguró antes la continuidad de Xavi, Puyol y Messi, cuyos acuerdos vencían más tarde, y que también le disgustó que se diera por hecha su continuidad sin mover un dedo.
Al Barça le ha contrariado que Valdés se negara a afrontar el caso con la directiva. “Juntos y en silencio se podría haber resuelto mejor”, aseguran en el consejo. “Así aumenta la presión”. El departamento técnico, en cualquier caso, no tiene dudas. “Víctor defenderá la portería con todo lo que sabe y tiene hasta que acabe su contrato”, afirmó Zubizarreta. “Nos coordinaremos para ver cuáles son los mejores pasos que podemos seguir y en el club trabajaremos para buscar las mejores opciones”.
Y Vilanova, que se enteró de la noticia el mismo jueves y ayer habló en privado con el jugador, fue especialmente pedagógico y comprensivo: “Respetamos su decisión y su sinceridad.. No ha dicho que se quiera marchar sino que no renovará. Es nuestro portero y, hasta que esté con nosotros, le ayudaremos y nos ayudará a ganar. Así que mientras rinda como ahora no tengo dudas sobre su titularidad. Yo le veo a gusto en el equipo. No hay que replantearse nada ni su decisión nos trastoca. Hay un margen de un año y medio”.
“Es el guardameta ideal para el Barça, el mejor en muchos años”, apunta Vilanova
“No me siento decepcionado”, prosiguió el técnico. “Digo que es una pena porque es el portero ideal para el Barça, el mejor en muchos años, y se merece una buena salida por todo lo que ha dado”, Y, al ser preguntado si Valdés no había elegido un mal momento para no renovar, enfatizó: “Nunca hay un momento ideal para que un jugador de su nivel se vaya”.
“Tampoco hay que olvidar” concluyó el entrenador, “que a veces el jugador quiere renovar y el club no le deja. Además del Barça y de Barcelona, que están muy bien, también hay otros sitios para ir”.
Valdés, que llegó al club a los 10 años y debutó en 2002, está acostumbrado a jugar y a disfrutar con las situaciones límite y, por tanto, se espera que sepa manejar la situación que ha generado al menos hasta final de temporada, momento en que se supone se podría plantear su traspaso y/o un fichaje. Al club le interesa cerrar un conflicto que ha roto el momento idílico del Barcelona. Ni siquiera la condición de capitán -Valdés es uno de los cuatro representantes de la plantilla- ha contenido al portero. La gestión de los egos continúa siendo un asunto muy delicado. La dirección deportiva deberá intensificar ahora la búsqueda de un portero que aguante la presión del Camp Nou y sepa jugar con los pies en el Barça, empresa en la que muchos ha fracasado mientras Valdés la cumplía como ningún otro portero.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.