"¿Veis a alguno que juegue mal?"

Le preguntaron una y otra vez a José Mourinho por el centro del campo que alineó en Pamplona, con Xabi y Granero juntos. Los jugones, como a muchos les gusta llamarles. No estaban ni Lass, ni Khedira y Coentrao, el comodín del técnico, se quedó en el banquillo. “Yo no me explico nada, yo quiero que el equipo gane y juegue bien. Desde principio de temporada hemos conseguido buenos resultados y lo seguimos haciendo, juegue quien juegue. En Pamplona jugaron Xabi y Granero, pero tres días antes [en Chipre] lo hicieron Khedira y Sahin y el equipo también estuvo muy bien y respondió”, comentó el técnico del Madrid. Y prosiguió, volviendo a atacar a la prensa: “esto demuestra la fuerza de un grupo que vosotros queréis desestabilizar cada día… la semana pasada era eso de que yo había firmado con el City, que Di María se iba fuera, que Casillas se iba al Schalke con Raúl. Hoy es lo de Higuaín. Es falso y no comento noticias falsas. El grupo es este y el último día lloraremos todos juntos o lo celebraremos todos juntos".

¿La presencia de Khedira es innegociable para usted?, le insistieron. El medio alemán nunca se ha quedado fuera por decisión técnica. Los partidos que se ha perdido han sido por lesión. En cuanto se recuperó del esguince en el ligamento del tobillo, Mou volvió a relegar a Granero al banquillo. “Me gustaría que me dijerais [a los medios] si hay alguien que juega mal. ¿Veis a alguno que juegue mal? Xabi y Granero estuvieron muy bien en Pamplona y me alegro tanto como vosotros, pero ¿Khedira jugó mal en Chipre? ¿Y Varane juega mal cuando le pongo? Yo no veo a nadie que juegue mal”, contestó Mourinho.

Mañana contra el Apoel, el técnico recupera a Pepe. “No haré muchos cambios, de hecho, el único futbolista que ha jugado en Pamplona y no está convocado es Arbeloa. Es un partido de Champions, pocos piensan que el Apoel marque cuatro goles aquí mañana pero el fútbol hay que respetarlo y la afición también”, analizó el técnico. No dará descanso, dijo, ni a Xabi Alonso ni a Cristiano, que han jugado prácticamente todos los partidos. “No están cansados, ni ellos ni el equipo”, dijo Mourinho citando, como ha hecho ya en varias ocasiones, su personal récord europeo. “Los jugadores quieren jugar. Tenemos un récord en Champions en los dos últimos años de muchas victorias, muy pocos empates y una sola derrota y queremos seguir haciéndolo bien”, explicó.

¿Se ha recuperado definitivamente el Madrid de los dos tropiezos ante el Málaga y el Villarreal?, le preguntaron al técnico portugués, acompañado en sala de prensa por Pepe. “¿Tropiezos? Esa no es la palabra. No se pueden ganar 40 partidos seguidos… Empatar un partido en casa [Málaga] es normal. Y a lo del Madrigal tampoco se le puede llamar tropiezo”, comentó. El caso es que después de pinchar contra el Villarreal, restó normalidad imponiendo la ley del silencio en el Madrid.

Hoy la normalidad ha hecho hasta que Pepe reapareciera en sala de prensa 887 días después. O, lo que viene a ser lo mismo, más de dos años después. A todas las preguntas sobre su actitud en el campo, sus expulsiones, sus comportamientos pocos deportivos, contestó con las mismas respuestas: “los árbitros hacen su trabajo y yo el mío, que es jugar y defender a mi equipo”.

Se sorprendió el central del Madrid cuando le preguntaron cuál es su defecto como defensa. “Todos tenemos defectos, no veo que tenga ninguno que me impida vestir la camiseta del Madrid”.