Freire se queda a un tubular de Boonen
El belga logra ante el cántabro su quinta victoria en el GP E3 de Harelbeke
Ningún español ha ganado nunca el Gran Premio de Harelbeke, llamado E3 en honor de la autopista que pasa por la villa flamenca y que este año se estrenaba en el World Tour. Solo el inevitable e inefable Juan Antonio Flecha, nuestro hombre del pavés, había subido una vez, en 2010, en el folclórico e indescriptible podio de la clásica conocida como el pequeño Tour de Flandes, porque es lo mismo que la Ronde, el llamado campeonato del mundo de los flamencos, pero en pequeño: trazado laberíntico, tramos de pavés, muros, pero menos (13 frente a 16) y kilómetros (203 frente a los 255, más de una hora de bicicleta más, de la carrera que desde 1913 se disputa el 14º domingo del año). Flecha no hay más que uno, pero si de otro corredor español se puede decir que comparte en parte los mismos genes de pionero, de aventurero, de curioso en mundos habitualmente indiferentes para el ciclista patrio, ese es Óscar Freire.
Arranqué demasiado tarde, me faltaron unos metros para remontar"
No podía ser otro sino el triple campeón mundial y rey de San Remo, pues, quien no solo igualara a Flecha, sino que estuviera a punto de convertirse en el primer español que gana una de las grandes de los muros. Le faltó al chico de Torrelavega, de 36 años, un tubular y le sobraron unos metros. El tubular, un par de centímetros, la ventaja que, como se apreció en la fotofinish, le separó del ganador, el belga Tom Boonen, quien, al parecer plenamente recuperado de su complejo Cancellara y de otros problemas mentales, en un 2012 pletórico, consiguió su quinto triunfo en Harelbeke, un récord, rompiendo el empate a cuatro con el histórico Rik van Looy. Pese a los muros, entre los que estaba el Muro de Grammont, el muro por excelencia que este año faltará en la Ronde, no hubo fugas ni ataques triunfantes y la victoria se la jugó al sprint un nutrido grupo. Boonen, experto y conocedor del medio, midió perfectamente la distancia y arrancó ante una curva ciega, lo suficientemente pronto como para ser el primero en hacerlo y lo suficientemente tarde como para que ni siquiera uno como Freire, el especialista, tuviera espacio para remontarlo en el último metro con el golpe de riñones.
Fue la llegada similar, guardando las distancias, a lo que solían ser los sprints en los años cincuenta y sesenta entre el grande Van Steenbergen, el que se lanzaba, y el pequeño Poblet, el que remontaba. Para Freire, el segundo puesto, recibido con fastidio nada más cruzar la línea y aceptado con fatalismo más tarde, supone, de todas maneras, una buena dosis de moral después de la frustración de San Remo y al comienzo de una semana importante, que continuará este domingo, el 13º de 2012, con la Gante-Wevelgem (que Freire ya ganó en 2008) y que se cerrará el domingo siguiente con el Tour de Flandes, donde Freire no cree tanto en sus posibilidades.
Con el triunfo de ayer, el quinto en lo que va de año, el ciclista belga parece recuperado de su 'complejo Cancellara' y de otros problemas mentales
En el mismo instante en el que Freire expresaba su amargura inicial –“habría ganado fácilmente porque estaba más rápido que Boonen si hubiera sabido que detrás de la curva justo estaba la meta”, dijo el cántabro, “pero no lo sabía y arranqué demasiado tarde, me faltaron unos metros para remontar”--, Flecha estaba en Puigcerdà viendo por la tele un sprint muy parecido, el de la quinta etapa de la Volta, en el que su compañero de equipo Rigoberto Urán arrancó tarde y le faltaron metros para remontar al ganador, el francés Julien Simon. Acaba de llegar la primavera y Flecha no está en Flandes, lo que suena a sacrilegio –más aún: ni siquiera se pegó al ordenador para ver por Internet el E3-- pero todo tiene su explicación: el ciclista del Sky se rompió la mano hace unas semanas y está recuperándose poco a poco, y tampoco tiene wifi en su casa de Puigcerdà. “El jueves salí por primera vez a la carretera y estuve dos horas muy bien, y hoy, viernes, seis horas. Y todos los días rodillo”, dice Flecha, quien no compite desde que el 26 de febrero quedó tercero en la Kuurne-Bruselas-Kuurne. “Así que me siento bien y en mi peso ideal. Solo me falta ritmo de competición”. Flecha volverá a pegarse un dorsal en el Tour de Flandes, lo que podría ser un hándicap en su intento de ganar por fin la Ronde. “Pero yo no puedo hacer otra cosa que ir así y hacerlo lo mejor que pueda”, dice Flecha. “Ni me planteo que pueda ser diferente. Esto es lo que hay. Y también me acuerdo que en 2005 logré mi primer podio en la París-Roubaix después de haber estado también parado, entonces con una fractura del acromio, en la clavícula. Antes solo corrí Wevelgem, donde fui segundo, y Flandes (12º). O sea…”
Clasificación de la E3
1. Tom Boonen (BEL/Omega Pharma) 5h.18.20 .2. Oscar Freire (ESP/Katusha) m.t .3. Bernhard Eisel (AUT/Sky) m.t .4. Leonardo Duque (COL/Cofidis) m.t
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