Dos partidos de sanción a Pepe y Rui Faria y uno a Mourinho y Özil

El Comité de Competición ha sancionado con dos partidos a Pepe y a Rui Faria, y con uno a Mourinho y a Özil por sus expulsiones en el partido del Madrid ante el Villarreal, el pasado miércoles. El central portugués es castigado por decirle “¡Vaya atraco, hijo de puta!” al árbitro del encuentro, Paradas Romero, aunque estas palabras no son consideradas un insulto, sino un menosprecio o desconsideración; Rui Faria fue expulsado por aplaudir una de las decisiones del colegiado en señal de burla, y además es reincidente en cuanto a las tarjetas rojas; mientras que Mou y Özil han recibido un encuentro de castigo por sus expulsiones por protestar. El Madrid recurrió estas sanciones ante el Comité de Apelación, que desestimó los recursos.

El árbitro redactó en su acta que amonestó a Mourinho por “salir del área técnica haciendo observaciones”. Las cámaras de Cuatro recogieron que el entrenador del Real Madrid había llamado dos veces “hijo de puta” a Paradas Romero. Este hecho ha quedado sin sancionar porque no fue recogido en el acta. El documento sí recogía, en cambio, un improperio similar de Pepe, también dirigido a Paradas: “¡Vaya atraco, hijo de puta!”. Sin embargo, el Comité de Competición ha considera estas palabras como un menosprecio o desconsideración, lo que implica sanciones de dos o tres partidos, y no como un insulto, ofensa verbal o actitud injuriosa, lo que conlleva castigos de cuatro a 12 encuentros. Pepe, que no fue expulsado, se perderá el partido de mañana ante la Real Sociedad en el Bernabéu y el que su equipo disputará en el Reyno de Navarra ante Osasuna, y estará disponible para recibir al Valencia y jugar luego contra el Atlético. Özil, que como Mourinho y Ramos tuvo que abandonar el terreno de juego antes de tiempo, fue expulsado por “aplaudir en forma de mofa” una decisión arbitral, y ha sido sancionado con un partido.

“En el minuto 52… fue amonestado por infringir persistentemente las reglas del juego”, decía el acta respecto a la primera amarilla a Ramos, ahora anulada

Sergio Ramos, que vio dos amarillas, no ha sido sin embargo sancionado al estimar el Comité de Competición que hubo un error en la redacción del acta y que por tanto no puede ser castigado al quedar anulada la primera tarjeta por dicho defecto de forma. El acta decía: “En el minuto 52… fue amonestado por infringir persistentemente las reglas del juego”. “Te has cargado el partido, te has cargado el partido”, le espetó más tarde Ramos al colegiado, palabras que no están en el acta. Rui Faria, segundo de Mourinho, recibe su sanción de dos encuentro por “aplaudir” una de las decisiones del árbitro, a lo que se suma su condición de reincidente, puesto que ha sido expulsado ya cuatro veces con el Madrid esta temporada. El Comité de Competición, pese a todo, no ha impuesto ninguna de las sanciones más duras a los madridistas.

Lass tampoco estará ante la Real Sociedad al ver la tarjeta amarilla en el Madrigal, su quinta amonestación por lo que cumple ciclo.

Por otra parte, el Comité de Competición ha archivado el expediente abierto a Gerard Piqué como consecuencia de la denuncia presentada por el Comité Técnico de Árbitros, que entendía que el central del Barcelona había faltado al respeto al estamento arbitral en unas declaraciones realizadas después del partido contra el Sporting del pasado 3 de marzo en el Camp Nou, en el que fue expulsado. La resolución del Comité argumenta que “no se aprecia una entidad ni un ánimo suficientes por parte del jugador para poder ubicar [las palabras de este] dentro de los supuestos sancionables contenidos en el Código Disciplinario de la Federación (RFEF)”.

“Las palabras de Piqué son graves y poco afortunadas”, señaló Sánchez Arminio tras las acusaciones de premeditación del central azulgrana

Así pues, a pesar de la denuncia de los árbitros, no habrá ninguna sanción para el defensa azulgrana, más allá del partido de suspensión que cumplió frente al Racing el pasado domingo día 11. Después de ver tarjeta roja por una falta al borde del área, Piqué llegó a afirmar, ya en la zona mixta del estadio, que había sido expulsado porque el árbitro tenía una cuenta pendiente con él: “Los árbitros se toman los duelos como algo personal. En el descanso le comenté una jugada de Keita que me pareció penalti y creo que me la tenía guardada”, soltó Piqué. “Los árbitros tienen todo el derecho a equivocarse, a no ver un penalti o una mano. Pero otra cosa muy distinta es tomar una decisión de forma premeditada. En la expulsión no hago ni falta”, añadió.

Un día después de aquella opinión, el presidente de los árbitros, Victoriano Sánchez Arminio, anunció en Radio Nacional de España que llevaría el asunto al Comité de Competición. “Un deportista debe tener respeto hacia el árbitro”, señalaba. “Las palabras de Piqué son graves y poco afortunadas”, añadía al día siguiente.