Fútbol con alpargatas de cáñamo

“Mundo era una bestia: paraba el balón con el pecho, se revolvía y gol. Era valiente, valiente, valiente”, recuerda el aficionado Vicente Montesinos sobre el mayor goleador de la historia del Valencia, ayer que se cumplían 70 años de la primera Liga conquistada por el club de Mestalla. Era la campaña 1941-42, compuesta por 14 clubes, cuando el equipo dirigido por Ramón Encinas marcó 85 goles en 26 partidos. Edmundo Suárez, Mundo (Barakaldo, 1916-1978), anotó 27.

En aquella época de penurias y escasez de luz, tras el espanto de la Guerra Civil, aquella mágica delantera fue bautizada como la eléctrica, según recuerda el historiador y periodista Alfonso Gil, formada por una mezcla perfecta de atacantes vascos (Epi, Mundo y Gorostiza) y dos valencianos (Amadeo y Asensi). Mundo era el delantero centro de referencia, un tanque abastecido por dos extremos hábiles y veloces: Epi y, sobre todo, el genial Gorostiza, la Bala Roja, un precedente de George Best por su talento dentro del campo y su vida disipada fuera de él.

“A Mundo lo recuerdo con alpargatas de cáñamo”, evoca Montesinos, “y unos pantalones bombacho de chándal en el hotel Tres Forques de Serra [localidad del interior a unos 30 kilómetros de la capital], que era donde se concentraba el Valencia en aquellos años. Nos chutaba a los niños y después se comían una paella. No seguían una dieta como ahora”.

Eran tiempos en que aficionados y futbolistas cruzaban juntos el Turia los domingos hacia Mestalla

En efecto, eran tiempos en que los aficionados y los futbolistas cruzaban el río del Turia los domingos por la tarde en dirección al campo de Mestalla. En la puerta del estadio se separaban, añade Alfonso Gil, unos se sentaban en sus localidades y otros se equipaban en el vestuario.

En los despachos, el presidente Luis Casanova, que había sido estudiante en Inglaterra y socio del Arsenal, contrató al exárbitro Luis Colina como secretario técnico. Y fue este quien buscó en la cantera vasca las bases de un equipo que ya un año antes conquistó la Copa del Generalísimo ante el Espanyol en Chamartín. Los 40 fueron años de esplendor en Mestalla. El Valencia perdió tres finales de Copa (1942, 1944 y 1947), ganó dos Ligas más (1944 y 1947) y otra Copa (1949). El Valencia y el Athletic Club alternaron la hegemonía del fútbol español.

La de 1942 fue la primera de las seis Ligas ganadas por el Valencia,junto a las de 1944, 1947, 1971, 2002 y 2004

“Los vascos vivían en una pensión en la calle Cirilo Amorós [en el centro de Valencia] propiedad de la dueña del Guretxea [popular restaurante de la ciudad]”, recuerda Montesinos. Mundo, precisamente, abrió un bar en la calle don Juan de Austria que todavía conserva el nombre de su popular exdueño: Casa Mundo, famoso por sus bocadillos de calamares. El portero de aquel Valencia también era vasco, Eizaguirre, integrante de la selección española que obtuvo el cuarto puesto en el Mundial de Brasil 1950. Jugó un partido frente a Estados Unidos y después dejó el la titularidad en manos de Ramallets. Otro internacional valencianista presente en Río de Janeiro fue Asensi, que empezó su carrera de atacante y acabó de lateral derecho.

Mundo jugó en varios clubes amateurs del País Vasco antes de la Guerra Civil. Durante el conflicto fichó por el Athletic, pero el contrato fue invalidado al haberse efectuado en territorio republicano. Quedó libre y, en 1939, el ejército franquista formó un equipo, el Recuperación de Levante, integrado por algunos jugadores que habían batallado en la región militar de Levante. Colina fichó a Mundo y este permaneció en el Valencia 11 temporadas, siendo pichichi de la Liga en 1942 y 1943.

El título de Liga de 1942 se confirmó con un triunfo en Mestalla ante el Espanyol por 2-1 en la penúltima jornada. La alineación más habitual era la formada por Eizaguirre, Álvaro, Juan Ramón, Bertolí, Iturraspe, Lelé y los cinco delanteros de la eléctrica. Fue la primera de las seis Ligas conquistadas hasta ahora por el Valencia, junto a las de 1944, 1947, 1971, 2002 y 2004.