“La afición debe dar un poquito más”
Mourinho lamenta el escaso apoyo de los madridistas: “Getafe y Vallecas están muy cerca” - “El Rayo no merecía perder; ningún rival nos creó tanto peligro”, añade
La imagen de Pepe pidiendo la hora al árbitro y la celebración de los jugadores tras el final fueron una prueba de lo sufrido que se le hizo el partido al Madrid. Un duelo trabado con ocho tarjetas amarillas y dos rojas: a Rui Faria, el preparador físico de los blancos, que suma tres en otros tantos meses, y Michu, que tocó el balón en su entrada a Khedira. Fue un encuentro complicado, tenso, en el que el Madrid pareció no sentirse cómodo nunca. En la primera media hora el Rayo ya había sacado cinco saques de esquina y Casillas recriminaba a Kaká su escaso compromiso a la hora de bajar a ayudar a sus compañeros.
Fue Cristiano Ronaldo, una vez más, quien desatascó el partido con un maravilloso taconazo desde el punto de penalti. Lo hizo sin mirar a la portería. Así, por instinto. Como si fuera lo más natural. A él, dijo, no le pareció el mejor de su carrera. “Ningún rival nos creó tantas dificultades”, concluyó José Mourinho.
“El Rayo no merecía perder. El empate era el resultado más justo
“El Rayo no merecía perder. El empate era el resultado más justo Mourinho
Por tercera vez esta temporada se quedó sin su preparador físico. Rui Faria fue expulsado de nuevo —como en Gijón y en el Bernabéu, en la Copa, contra el Málaga—. Según Mourinho, quien esperó a un colegiado en un aparcamiento del Camp Nou para decirle que era un sinvergüenza, su ayudante fue educado: “Su comportamiento fue igual al de todos los miembros del banquillo: Karanka, Chendo, Silvino... Un comportamiento normal de gente que, cuando no está contenta con algo, protesta, pero con educación y respeto. Si le echan a él, deberían echarnos a todos”. “Este es el cuarto árbitro más arrogante que me he encontrado. Hay modos de hablar. Puedes decir: ‘Por favor, se puede callar’ o ‘por favor, se puede sentar’. Con tranquilidad y educación es más fácil que con arrogancia. Hay algunos más simpáticos que tienen una relación más positiva con la gente del banquillo. Quizás este tenga una personalidad imponente”, continuó el portugués.
El caso es que, según el acta, el cuarto árbitro ya había invitado a Rui Faria a quedarse tranquilo. El preparador físico fue expulsado por “levantarse del banquillo, con los brazos en alto, voz en grito y protestando reiteradamente una decisión arbitral, habiendo sido previamente advertido por el cuarto árbitro”.
“Yo mejor ni hablo del árbitro”, espetó José Ramón Sandoval, el técnico del Rayo, que dijo que su equipo no había podido ganar “por determinadas circunstancias”. ¿Cuáles? “Dejémoslo ahí. No quiero profundizar porque nunca hablo de los árbitros”, contestó pidiendo que el Comité de Apelación revise las imágenes de la expulsión de Michu.
“El Rayo no merecía perder”, sentenció Mourinho; “el empate era lo más justo. Ahora habrá gente que dirá que el Madrid no ha hecho un buen partido, pero es el Rayo el que ha hecho un partido fantástico. Nunca ha bajado los brazos y se ha arriesgado hasta el final, incluso con los cambios [Sandoval acabó con una defensa de tres para meter a Tamudo]”.
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