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EUROLIGA

Raúl López, mano de santo

El conjunto vasco gana en el último segundo al Montepaschi (60-59) y depende de sí mismo para clasificarse y dejar fuera al Madrid

Los jugadores del Bilbao celebran el triunfo.
Los jugadores del Bilbao celebran el triunfo.ALFREDO ALDAI (EFE)

Una canasta sobre la bocina de Raúl López tras un bucle infinito de tiros libres dio la victoria al Gescrap Bizkaia sobre el hasta ahora invicto Montepaschi Siena. El equipo de Fotis Katsikaris logró imponerse al complejo equipo italiano y acumular ventaja en su lucha con el Real Madrid por alcanzar los cuartos de final de la Euroliga (el conjunto blanco, reciente campeón de Copa, ya no depende de sí mismo).

El arranque del encuentro pronto se convirtió para el Bizkaia en una ensalada de acciones apasionadas pero poco efectivas y ocasiones robadas con guante de seda por los italianos, astutos a cada paso y peligrosos en cada ráfaga ofensiva. Mumbrú abrió el marcador bilbaíno tras un triple de Moss y pese a las espectaculares recuperaciones de Jackson no le fue fácil al equipo encontrar el camino hacia el control, al menos parcial, del correoso Siena. Cada canasta era un triunfo en sí mismo para los bilbaínos, que arrastraban un terco desacierto en el aro. D’or Fischer tuvo que hacer de contorsionista en más de una ocasión para anotar ante un Montepaschi replegado que controló la velocidad y el ritmo del choque.

BIZKAIA BILBAO, 60 - MONTEPASCHI, 59

Bizkaia Bilbao: Jackson (0), Vasieliadis (6), Mumbrú (10), Hervelle (0) y D'or Fischer (7) —cinco inicial—; Raúl López (15), Blums (3), Grimau (2), Banic (16) y Mavroedis (1).

Montepaschi Siena: McCalebb (12), Thorton (4), Stoonerook (6), Moss (10) y Andersen (0) —cinco inicial-; Zisis (0), Rakocevic (14), Aradori (3), Moss (0), Lavrinovic (2), Ress (5) y Carraretto (3).

Parciales: 7-8, 14-14, 18-17 y 21-20.

Árbitros: Muhvic (CRO), Ryzhyk (UCR) y Lopes (POR). Eliminado: Moss (m. 39).

Bilbao Arena: 9.922 espectadores.

El Bizkaia tuvo que hilar fino en sus acciones porque el Siena empezó a saber cómo adentrarse en la zona bilbaína, no sin tener que escalar montañas y atravesar arenas movedizas. Un castigador Rakocevic, bien secundado por Moss, se topó con la firme oposición de Blums y el arrojo de Banic, uno de los mejores jugadores del encuentro. Mumbrú plantó batalla, Raúl López tomó las riendas, y el equipo no perdió la esperanza. Con un 50-50 en el marcador tocaba echar el resto a menos de dos minutos para el final, y McCalebb asumió el reto. Parecía que los tiros libres finales decidirían el resultado. D’or Fischer acertó uno de dos, igual que McCalebb. Con un 54-54 a 20 segundos del final, otros dos aciertos de Raúl López pusieron al Bizkaia por delante. McCalebb igualó la gesta y provocó otra falta que Raúl aprovechó en la canasta.

Rakocevic falló un último tiro libre que casi sentenció el encuentro. Hasta que a Raúl López no le falló el pulso al encestar la decisiva canasta sobre la bocina. Con el público en pie y coreando su nombre, el base catalán saboreó su gran momento de gloria. El Gescrap Bizkaia amenaza con revolver la Euroliga.

Las matemáticas de Bilbao y Madrid

La apretada victoria (60-59) del Bilbao sobre el Siena tuvo consecuencias que superaron al propio equipo vasco. El Real Madrid, también en el Grupo F de la Euroliga de baloncesto, tiene ahora que conseguir dos victorias en los dos partidos que le restan de la fase de grupos para mantener sus opciones de clasificación, que además dependen de lo que haga el Gescrap Bilbao. En juego, disputar los cuartos de final de la Euroliga.

El campeón de la Copa del Rey quedará eliminado si pierde el jueves (20.45, Tdp) ante el Unicaja, que ya no tiene opciones: el Bilbao tiene tres victorias por dos derrotas, frente al 2-2 madridista con un encuentro menos. Si logra ese triunfo, el Madrid se enfrentará a un complicadísimo panorama en la última jornada.

Si el grupo de Laso vence en Siena y el Bilbao pierde en Málaga en la primera semana de marzo, el equipo blanco sería segundo del grupo si gana por 19 puntos o menos y primero si gana por 20 o más en Siena. Si hay triple empate, el Madrid tendría que ganar por 23 en Siena para clasificarse para los cuartos, y por 30 para evitar al CSKA en cuartos. En cualquier caso, necesita dos victorias en los dos partidos que le restan.

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