El último símbolo navarro
Recién cumplidos los 36 años, Puñal se ha ganado a pulso un hueco en la historia de Osasuna
Trece temporadas vistiendo la camiseta de Osasuna dan para mucho y a sus 36 años, Patxi Puñal (Pamplona, 1975) sigue donde empezó, en el centro del campo, organizando un equipo que de momento no ha sabido encontrarle un sustituto. Quizás porque no lo encontrará ya que el ahora capitán rojillo, es tras la retirada de César Cruchaga hace tres años, el último símbolo del club. Uno de esos futbolistas que permanecerán en la memoria de la afición navarra. "Estar siempre aquí me ha permitido disfrutar de mi familia, algo que no pueden decir muchos futbolistas. Gracias a esta estabilidad me he podido mantener todo este tiempo", asegura.
Entre concentración y concentración, cada vez que puede, sigue escapándose al monte con sus cuatro perros: "Es una afición que he tenido siempre". El aire frío de la montaña le ha servido para escapar de la monotonía del fútbol. Lejos de mirar el pasado con nostalgia, Puñal lo recuerda sin nada que añadir. "No siento que me falte nada por conseguir. Mi objetivo es y ha sido siempre disfrutar con el futbol, pero no solo con él", comenta.
El ahora capitán rojillo fue uno de los implicados en la histórica temporada 2005-06. De la mano de Javier Aguirre, Osasuna se clasificó por primera vez para la Liga de Campeones. "Aquellos fueron los mejores años que me han tocado vivir desde que estoy aquí. Era maravilloso, teníamos una confianza terrible, la afición estaba con nosotros y el equipo funcionaba", recuerda Puñal. "Aun así, creo que este equipo es más ofensivo que aquel. Al mister le gusta que los jugadores entren por la banda y que haya mucho movimiento arriba. Con los delanteros que tenemos este años creo que hemos ganado mucha pegada", asegura.
A pesar de su implicación no siempre sopló el viento de cara. Titular hasta ahora en todos los partidos con José Luis Mendilibar, no lo tuvo tan fácil con José Antonio Camacho: "vivimos momentos complicados, el equipo parecía estancado, las cosas no salían y no íbamos a mejor. Camacho al principio no me incluyó entre los titulares, pero eso no hizo que me replantease nada".
Recuperado de una lesión muscular, Puñal capitaneará de nuevo a Osasuna en el Santiago Bernabeu (12:00, C+ Liga y GolT). "Ya hemos conseguido buenos resultados allí", comenta con la tranquilidad que le da la experiencia. En realidad, no le hace falta ningún brazalete para que sus compañeros le escuchen. "El trapo solo es un detalle", dice. A pesar de que termina contrato en junio, nada parece que se vaya a interponer entre el club y el jugador. Ya lo canta la hinchada navarra cada vez que salta al campo: "No podrán parar, a Patxi Puñal".
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.