Los líderes se atascan

El Elche y el Sabadell no pudieron continuar con su buena racha del inicio de la temporada, en que habían sumado tres victorias en otros tantos partidos, y pincharon en sus visitas a Huelva y a A Coruña, respectivamente. Los ilicitanos se vieron superados por el Recreativo (1-0) y los catalanes cayeron ante el Deportivo (2-1). Ahora, la clasificación de Segunda la lideran el propio Depor, el Hércules, el Elche y el Sabadell, empatados todos a nueve puntos. Por la zona baja, el Cartagena, que perdió frente al Alcorcón (2-0), es el único equipo de la categoría que aún no ha sumado ni un solo punto, tras el empate del Huesca (3-3 frente al Alcoyano) y la victoria del Murcia en Valladolid (1-3).

Quizá el Deportivo solucione la papeleta en Segunda División a base de fogonazos o con las apariciones de sus futbolistas más estelares, aquellos a los que en verano costaba esfuerzo imaginarse en la categoría. Pero después de cuatro partidos, tres de ellos en Riazor, no resulta descabellado colegir que quienes auguraban un dulce tránsito por la categoría son los mismos que ayer se devoraban las uñas mientras los jugadores deportivistas guardaban la pelota en el córner para defender una mínima ventaja ante el Sabadell. Con sus nervios de acero para definir un mano a mano ante el portero, Valerón rescató al equipo cuando este se caía, cerca ya del descanso, tras una gaseosa primera parte en la que el Deportivo fue de más a menos y estuvo en el alambre por sendos remates de Florian, uno al larguero, otro desviado a córner por Aranzubía. Marcó Valerón y rubricó Guardado al aprovechar un pase de Salomão. Luego, recortó Baha en una nueva desatención defensiva y Oltra retiró a Guardado para dar entrada a Morel. El equipo se echó atrás con más miedo que vergüenza. Le sobró ambición al Sabadell para buscar la igualada, pero no acierto. Y ganó el Depor.

Peor le fue al Elche, que se las prometía muy felices antes del encuentro en el Nuevo Colombino frente al Recreativo. El conjunto de Bordalás había ganado los tres partidos jugados hasta ahora y el conjunto andaluz solo había sumado una victoria. Los ilicitanos dominaron a su rival con claridad, pero acabaron perdiendo (1-0) tras un gol de Alex Quillo en la segunda parte. Tras el gol, el Recre se limitó a esperar el pitido final mientras el Elche se desesperaba, en vano, por marcar. Los de Bordalás dejan escapar, de esta forma, la oportunidad de colocarse líderes en solitario. El Xerez, por su parte, no pudo aprovechar el pinchazo del Elche y del Sabadell para colocarse por encima de los equipos que tienen nueve puntos. Los andaluces, que solo han marcado dos tantos esta campaña, volvieron a evidenciar que les cuesta una vida hacer gol. Dominaron el juego durante buena parte del partido, pero José Mari, autor de todos los goles de su equipo esta temporada, no estuvo tan fino de cara a la portería como en otras ocasiones. El Gimnàstic, que con dos puntos sigue en puestos de descenso, gozó de buenas opciones con Powell, pero tampoco estuvo acertado. Sigue, por tanto, la mala racha del Xerez ante el equipo catalán en Chapín, en donde no le gana desde hace 10 temporadas.

Por la parte baja de la clasificación, el Murcia, que había perdido los tres partidos que había jugado hasta ahora, dio la sorpresa tras superar al Valladolid (1-3) en Zorrilla. El equipo blanquivioleta, que no había perdido aún, se vio lastrado en la primera parte por sus continuos fallos defensivos, que permitieron a los pimentoneros irse al descanso con 0-2 gracias a los goles de Richi y Baraja, que marcó en propia puerta. Tras la reanudación, el Valladolid fue incapaz de hacer daño pese a jugar con un hombre más tras la expulsión de Pedro en el minuto 61. Además, Bueno, el máximo goleador de la categoría con cuatro tantos, falló un penalti. El único consuelo de los castellanos es que Javi Guerra, que el año pasado logró 29 dianas, volvió a encontrarse con el gol después de haber estado lesionado en el inicio de la temporada. De poco le sirvió al Valladolid acortar distancias, ya que Iturra puso el definitivo 1-3 en el minuto 89 tras un contragolpe.

También el Huesca estrenó su casillero de puntos al empatar con el Alcoyano en un partido loco que terminó 3-3. El conjunto oscense se adelantó 2-0 gracias a los goles de dos de los fichajes de este año: Javi Martínez y Molina. Antes del descanso, sin embargo, Álvaro García y Miki pusieron el empate en el marcador. El Huesca siguió luchando y el veterano Luis Helguera puso de nuevo a los aragoneses por delante con un gol a la salida de un córner, pero a los dos minutos el Alcoyano volvió a empatar gracias a Rafa Gómez, que acababa de salir al campo.

El que no se ha estrenado aún es el colista, el Cartagena, que sigue sin puntuar esta temporada tras caer en su estadio frente al Alcorcón (0-2). El equipo blanquinegro aguantó la presión de su rival hasta el minuto 60, cuando el partido se le puso muy negro. Raúl Goni fue expulsado por una entrada a Fernando Sales y, justo después, Mora sacó la falta y Quini, el ariete que el curso pasado marcó 22 goles, empujó el balón al fondo de la red consiguiendo su primer tanto esta campaña. Tras el golpe, la afición explotó al grito de "Paco vete ya", en referencia a Paco López, el entrenador del Cartagena que debuta este año en Segunda. Montañés dio la puntilla marcando el segundo en el minuto 76 con un misil desde la frontal del área. Los números del Cartagena son significativos: cuatro derrotas en cuatro partidos, 11 goles en contra y solo dos a favor.

El Numancia, por su parte, rescató un valioso triunfo en su partido frente al Girona (1-0), gracias a un gol que Julio Álvarez marcó en el descuento, mientras que Las Palmas cayó en su estadio (0-1) frente al Córdoba. Pierde gas el Celta, que encadena dos derrotas consecutivas y se sumerge en la mitad de la tabla de Segunda División. Ante el Almería (1-0) firmó un partido deplorable del que no fue el único culpable porque tampoco los locales expusieron los argumentos que se le suponen a un aspirante al ascenso. Sentenció al menos con un golazo, un disparo desde treinta metros de Bernardello que describió una diabólica parábola y se coló cerca de la escuadra. La jugada, con todo, retrata el despropósito matinal en el estadio de los Juegos del Mediterráneo porque nació de un balón cortado de manera involuntaria por los pies del colegiado Miranda Torres cuando el Celta trataba de sacar la pelota de su campo.