"Esto no tiene vuelta atrás"

Doce equipos de la Liga española se han reunido en el Ramón Sánchez Pizjuán durante cinco horas y citados por el presidente del Sevilla, José María del Nido, para debatir un nuevo reparto de los derechos televisivos, plantear una reforma en profundidad de los estatutos de la Liga de Fútbol Profesional y proceder a la puesta en marcha efectiva del control económico aprobado por la propia LFP. Los clubes participantes en la cita no han cuestionado la figura del presidente de la Liga, José Luis Astiazarán, y han tendido una mano al Real Madrid y al Barcelona, a los que tienen previsto invitar a la próxima reunión del grupo, a celebrar en tres semanas y en una ciudad todavía no elegida.

Del mismo modo, el portavoz de esta primera reunión, José María del Nido, ha aclarado que los contratos de televisión que los clubes tienen firmados con los operadores serán respetados hasta la última letra, aunque al mismo tiempo se intentará que sea la LFP la que negocie de forma colectiva estos derechos. Actualmente, hay una gran diferencia entre los 150 millones de euros que perciben el Barça y el Madrid (el 26% del dinero que el fútbol español obtiene de la televisión, unos 680 millones), frente a los ingresados por 12 de los clubes más modestos. Entre ellos figura un grupo intermedio, encabezado por el Valencia y el Atlético, con 42 millones cada uno, un escalón por encima del Villarreal (25) y el propio Sevilla (24).

Por otra parte, el grupo de clubes reunido en Sevilla, entre los que estaban el Atlético de Madrid, el Valencia, el Athletic y el Villarreal, ha tendido la mano a todos los clubes de Segunda División, que serán invitados también a las próximas reuniones. También se asegura que los equipos que bajen a Segunda serán compensados por este descenso.

"Esto no tiene vuelta atrás", ha afirmado el presidente del Villarreal, Fernando Roig. "Lo que se ha aprobado por los equipos aquí reunidos tiene un carácter irrevocable. Luchamos por el bien del fútbol", ha asegurado Del Nido. "Astiazarán es nuestro presidente y no lo cuestionamos, aunque sí deseamos cambios estructurales en la LFP", ha añadido el presidente del Sevilla. "No tenemos previsto realizar medidas contundentes y estoy seguro de que nuestras razones son lo suficientemente importantes como para convencer a Madrid, Barcelona y resto de equipos que no han acudido a esta reunión", ha rematado.

En la cita también se ha hablado de los nuevos horarios de la competición y del problema con las radios, aunque no se ha llegado a ningún acuerdo entre los presentes. "No nos ha dado tiempo para llegar a una conclusión en estos dos puntos", ha destacado el presidente del Sevilla, que seguirá permitiendo la entrada de las radios al Ramón Sánchez Pizjuán.