El enésimo regreso de Tiger Woods
El estadounidense volverá a jugar la próxima semana, antes del PGA, después de tres meses lesionado y de cambiar de caddie
Tiger Woods ya tiene fecha de regreso. Tras 11 semanas de intensa espera, dos grandes en el limbo (ambos en manos de norirlandeses; el Abierto de Estados Unidos para Rory McIlroy y el Británico para Darren Clarke) y el despido de su vanagloriado caddie Steve Williams, el exnúmero uno del mundo, actualmente vigésimoprimero, volverá al escenario que le vio hacerse grande: los campos de golf. Será en el Brigestone Invitational, uno de sus torneos preferidos, donde tiene siete victorias y un anecdótico penúltimo puesto, el año pasado, que suponía la primera vez que no estaba entre los cuatro primeros en un total de 11 participaciones en este campeonato. "Estoy ilusionado por volver a jugar", dijo Woods, de 35 años, en un escueto comunicado a través de Twitter.
Aunque siempre que juega es candidato a ganar, la sombra de la duda sobre su rendimiento planea sobre Tiger, que no juega desde el 12 de mayo en el The Players, cuando abandonó tras unos malos nueve primeros hoyos (firmó seis sobre par). Entonces se retiró por unos dolores en la rodilla y el tendón de Aquiles de la pierna izquierda, molestias que arrastraba desde el Masters de Augusta, apenas tres semanas antes. Esas molestias le han pasado factura. Tiger no jugó ni el Abierto de Estados Unidos, ni el Open Británico por recomendación médica, y corría peligro su participación en el último major de la temporada, el Campeonato de la PGA (11-14 de agosto en Atlanta).
El californiano no ha querido faltar a esta cita, donde aspira a romper la peor sequía de victorias estadounidenses en un grande: la última fue en abril de 2010 cuando Mickelson se enfundó la chaqueta verde. Y también a acabar con otra racha negativa: Tiger no gana desde noviembre de 2009, cuando, tras vencer en el Masters de Australia, se destaparon una serie de infidelidades que acabaron con su matrimonio e incluso le obligaron a retirarse temporalmente del golf. Cayó al ostracismo más absoluto y todavía no ha vuelto al máximo nivel.
Además, su enésimo regreso, el tercero en los últimos tres años, lo hará sin su caddie, sin su mejor amigo, Steve Williams. El neozelandés, que estuvo en 13 de los 14 grandes que ha ganado Tiger, rompió su relación con el californiano tras haber llevado la bolsa de Adam Scott en tres torneos durante esta última ausencia de Tiger. Según Golf Channel, su nuevo caddie será Bryon Bell, amigo personal y presidente de la marca de ropa del Tigre, con el que ya ganó un torneo en 1999 y quedó segundo en otros dos en 2000 y 2003. Una piedra más en el camino de vuelta del todopoderoso Tiger Woods.
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