Otro reto, la misma idea
Después de los éxitos de la absoluta y la sub 21, la selección española sub 19 encara el Europeo de Rumanía
"Claro que soñamos con ser los nuevos Casillas, Iniesta y Villa, por eso vamos a intentar ganar como hicieron ellos". Así de rotundos se muestran los chavales de la selección sub 19 que han debutado hoy contra Bélgica en el del Europeo de Rumanía. El partido ha sido suspendido por una tormenta después de 15 minutos cuando España ganaba 1-0 con un gol de Morata. Mañana el encuentro volverá a empezar con 0-0 en el marcador, según el reglamento de la UEFA. Hasta Bucarest han viajado 18 futbolistas, después de los cinco descartes del seleccionador, Ginés Meléndez. "Vamos con la intención de dar una buena imagen y jugar como los mayores", explica Ignasi Miquel, la joven promesa formada en la cantera del Barça que juega en el Arsenal. El Madrid es el equipo que más jugadores (tres) aporta a la selección: Daniel Carvajal, Alejandro Fernández Iglesias y el recién renovado Morata. También viaja a Rumanía Pablo Sarabia, otro joven canterano del Madrid que hace unos días hizo oficial su marcha al Getafe. Por parte del Barcelona viajan Sergi Gómez y Gerard Deulofeu.
Los jugadores de la selección reconocen que se sienten un poco presionados por los buenos resultados de las categorías superiores y esperan dejar a España en una "buena posición". "Lo que tenemos que hacer es incidir en nuestro juego, un juego de toque, debemos mantenernos concentrados todo el partido y estar un poco pendientes de la estrategia", cuenta Juanmi Jiménez, del Málaga.
La misma idea se repite en cada entrenamiento. "Nuestro objetivo es ante todo la formación del jugador. Este equipo lleva muchos años jugando juntos y están muy unidos. Lucharemos por llegar, al menos, a disputar las semifinales, pero lo importante es trabajar con el jugador para que podamos lograr un equipo competitivo", explica Ginés Meléndez. "El míster nos pide que demos salida al equipo y que presionemos al rival para que no puedan sacar el balón jugado de forma cómoda", añade Álvaro Morata. La selección española es, de las ocho participantes, la más laureada de la categoría con cuatro trofeos continentales, y es la única que repite presencia respecto al Campeonato de Europa celebrado en Francia el pasado verano. Ignasi Miquel, Ramalho y Morata, entre otros, liderarán a los sub 19 en el intento de repetir éxitos mayores.
Ignasi Miquel (Barcelona; 1992) es una caso atípico de nuestro fútbol. Un chaval con las ideas muy claras, un central zurdo de la cantera azulgrana que debutó con el Arsenal en la Copa la temporada pasada. Empezó a jugar con ocho años en las categorías inferiores del Espanyol y unos meses más tarde lo llamaron de La Masia para que formara partera de la cantera del Barcelona. Después de cinco años, un día le dijeron que ya no contaban con él. Con 13 años recién cumplidos buscó equipo y comenzó a jugar con el Cornellà: "Es muy duro que con 13 años te digan que no te quieren y que no vales para el Barça, pero tenía una cosa clara y es que me gustaba el fútbol, que era mi vida y seguí a tope".
A los 16 años el Barcelona quiso recuperarlo, pero en ese momento tenía un oferta en firme para irse al Arsenal de Wenger y optó por lo segundo, irse a Londres, él solo sin su familia a vivir a un pequeño pueblo al norte de la ciudad junto a una nueva familia, cerca de los campos de entrenamientos gunner y sin saber nada de inglés. "Era la una oportunidad de empezar de cero, una oportunidad en la que dependes de ti mismo y esto ya lo conocía, ya sabía cómo funcionaba el Barcelona y el Arsenal me atraía mucho", reconoce. Después de dos temporadas en el Arsenal, asegura que no se ha arrepentido ni un solo día. Ha jugado dos partidos con el primer equipo y se ha convertido en el capitán del filial. Le gusta alabar a Wenger: "Ayuda mucho, le gusta hablar contigo, te corrige, pero también el entrenador del segundo equipo que es el que me ha dado las oportunidades". Sobre lo de volver a España, por ahora no se lo plantea y lo único que desea es quedarse en el Arsenal y poder triunfar como Cesc, al que le desea que por fin su sueño de volver a España se cumpla.
Jonás Ramalho (Baracaldo; 1993), defensa vizcaíno del Athletic es un jugador doblemente histórico. Con 14 años fue el futbolista más joven que nunca haya vestido la camiseta del club, tras jugar un partido amistoso contra el Amorebieta, y además ha sido el primer jugador de raza negra en hacerlo. Todas estas cosas las lleva con naturalidad: "Alguno tendría que ser el primero, es bastante responsabilidad y mucha presión pero haces lo que el míster te manda y cuando ves que los compañeros te apoyan, en cuanto das unos pases bien y ves que lo sabes hacer, te centras y haces las cosas como te han enseñado. Es lo mismo en Primera que en otras categorías, trabajando duro y ganándome el puesto".
Jonás nació en Vizcaya, pero su lugar de residencia es Romo, donde vive con sus padres Tomás y Natalia. El futbolista es hijo de padre angoleño y madre vasca, y proviene de una familia humilde en la que no hay antecedentes futbolísticos. Jonás comenzó a jugar en la escuela de fútbol Lagun Artea pero ya siendo alevín, con 10 años, le captó el Athletic para su cantera. La pasada temporada estuvo lesionado durante seis meses y ahora que está recuperado aspira a hacerse un hueco en el primer equipo. El Europeo de Rumanía es su gran oportunidad para convencer al nuevo entrenador del Athletic, Marcelo Bielsa, para que cuente con él en su nuevo proyecto.
Álvaro Morata (Madrid; 1992), delantero centro de la cantera del Madrid, hizo la pasada pretemporada con el primer equipo, a las órdenes de Mourinho. "Fue algo espectacular, yo estaba como en un sueño entrenándome con Cristiano y con Iker", cuenta. Unos meses después, en diciembre, debutó en Primera en La Romareda contra el Zaragoza y hace unos días firmó su renovación con el equipo blanco hasta el 2015. Todas estas noticias las vive con los pies en el suelo: "Voy a estar en el Castilla entrenándome y las oportunidades que tenga las voy a aprovechar al máximo". Hacia el entrenador portugués solo tiene buenas palabras: "Yo creo que sí confía en la cantera lo que pasa es que tiene grandes responsabilidades. Para mí sé que es difícil jugar con el primer equipo, pero trabajaré para que cuenten conmigo".
Grupo A: Grecia, Irlanda, República Checa y Rumanía.
Grupo B: España, Bélgica, Serbia y Turquía.
España, después del partido contra Bélgica, jugará el día 23 ante Serbia y el 26 se medirá a Turquía. Se clasifican los dos primeros de cada grupo para las semifinales, que son el 29 de julio. La final, el 1 de agosto.
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