La camada portuguesa

Cuando un entrenador llega a un nuevo equipo y empieza a pensar en los futuros refuerzos la mayoría de las veces pesca en las aguas que le son más conocidas: sus antiguos conjuntos y las Ligas de las que procede. José Mourinho no ha sido ajeno a esta tendencia desde que entró en el Real Madrid la temporada pasada. Pese a que sus redes también han rastreado con fuerza la Bundesliga (Özil, Khedira, Sahin y Altintop son prueba de ello), el último fichaje del club, su compatriota portugués Fabio Coentrao, procedente del Benfica, responde a este perfil. Con el lateral, la entidad blanca suma ocho lusos en el primer equipo, divididos a partes iguales entre cuerpo técnico y plantilla (Cristiano Ronaldo, Pepe, Carvalho y el propio Coentrao).

Mourinho aterrizó en la capital de España de la mano de sus colaboradores habituales durante las últimas temporadas. Rui Faría, como preparador físico; Silvino Louro, entrenador de porteros -lleva con ambos desde su etapa en el Oporto- y José Morais -que se unió a Mourinho en el Inter-, como asistente. Todos ellos portugueses. Sin embargo, Mourinho rebajó la mezcla lusa con la incorporación a su plantel -como acostumbra- de un hombre de la casa, Aitor Karanka.

Pero Lauro, Faría y Morais no fueron los únicos hombres de confianza de Mourinho que llegaron la pretemporada pasada. El líder del banquillo blanco recurrió a un viejo conocido del Chelsea, el central de 33 años Ricardo Carvalho, también portugués. Terry y él habían formado una pétrea dupla de zagueros en el conjunto londinense y Mourinho quiso comprobar su química en el Real Madrid junto a Pepe, con el que también comparte selección. De hecho, el técnico del Real Madrid tuvo el curso pasado la oferta de entrenar a ambos al frente de su país, pero Florentino Pérez se negó a ello.

Con la llegada de Coentrao, solo España tiene más jugadores bajo su bandera en el equipo (11). Portugal le ha arrebatado la segunda posición a Argentina tras la salida de Garay, que deja a la albiceleste con tres futbolistas: Di María, Higuaín y Gago. Tras estampar la rúbrica en su nuevo contrato, el exlateral del Benfica tratará de que la influencia lusa siga aumentando en la Castellana.