Fabricio ya no juega de rebote

Fabricio Agosto (Vecindario, Las Palmas; 1987) debutó en Primera con el Deportivo en la temporada 2007-2008. Desde entonces, solo ha podido triunfar el año pasado en Segunda con el Recreativo, tras su paso infructuoso en el equipo gallego y el Valladolid. Ahora llega al Betis, donde debe demostrar que lo del año pasado no es casualidad, que si juega en la máxima categoría del fútbol español ya no es de rebote.

Con 20 años, Fabricio llegó a la portería de Riazor tras un episodio lamentable: una pelea entre Gustavo Munúa y Dudu Aouate, los dos porteros principales de la plantilla. Miguel Ángel Lotina, entrenador del Depor, apartó del equipo al uruguayo y al israelí. El siguiente en la lista de porteros era Fabricio, que había llegado en 2005 al filial deportivista. Jugó seis partidos, en los que encajó 10 goles, y Lotina tuvo que recurrir de nuevo a Munúa. A la temporada siguiente, el Depor se deshizo tanto de Munúa como de Aouate y, para desgracia de Fabricio, fichó a Aranzubia, que fue titular toda la temporada. Fabricio, entonces, regresó al filial, a Segunda B.

Ante la perspectiva de jugar poco y la necesidad de mejorar, Fabricio, en el verano de 2009, se fue al Valladolid, donde tuvo que competir con Justo Villar y Jacobo. En Pucela tampoco tuvo suerte; jugó un solo partido en el que encajó dos goles y el equipo descendió a Segunda. "Llegó tarde y tenía dos porteros por delante", explica José Luis Mendilibar, su primer entrenador en el Valladolid; "pero, es un portero con mucho futuro, que no se cansa de trabajar. En los entrenamientos siempre pedía más".

El año pasado se marchó cedido al Recreativo, donde encontró la continuidad, disputando 40 partidos de Liga, y se mostró sólido en la portería, encajando 36 goles. En general, el equipo de Huelva completó una buena campaña y estuvo hasta la última jornada con opciones de meterse en el playoff de ascenso a Primera. "La temporada pasada le ha venido muy bien para demostrarse que vale", opina Mendilibar; "si lo ha hecho bien en Segunda no tiene porque no hacer lo mismo en Primera, pero necesita ganarse el puesto y tener continuidad". En el Betis, se encontrará con Goitia y Castro. Pero ya no parte con desventaja.