LeBron James: "Lo siento como un fracaso personal"

Pocas veces una final ha tenido en el punto de mira negativo a un jugador. La animadversión de una mayoría de aficionados hacia LeBron James ha sido manifiesta. Su rocambolesco anuncio, hace casi un año, retransmitido en directo en un programa de televisión, de dejar los Cavaliers de Cleveland, para reunirse con Dwyane Wade y Chris Bosh, fue la gota que colmó el vaso en la percepción que la gente se ha ido dibujando. LeBron es visto como una estrella egoísta y arrogante y muchas de sus actuaciones en la cancha no han hecho sino reforzar esta visión que probablemente no se ajusta del todo a la realidad.

La final dejó muchas heridas. Lo que fue un bálsamo para los Mavericks, constituyó un monumental chasco para los Heat. Y en especial para LeBron, que a sus 26 años, seguirá una temporada más sin haber ganado el ansiado anillo. Para otros muchos jugadores no habría mayor problema, más allá de una lógica decepción por un título perdido. Sin embargo, para alguien al que se apoda desde sus años de instituto The King o The Chosen One, al que se puso enseguida en la estela de Michael Jordan y que firmó un contrato de 90 millones de dólares con una multinacional cuando tenía 18 años, el fiasco es monumental.

"Siempre que te sientes en la cima de una montaña y caes es definitivamente como un fracaso personal", admitió LeBron a la conclusión del encuentro ante Dallas. "Por supuesto que me duele, pero no voy a colgarme por ello. Todas las personas que querían ver mi fracaso, al final del día tendrán que irse a dormir y cuando se despierten mañana tendrán la misma vida que antes. Yo voy a seguir teniendo mi propia vida e intentaré ser feliz".

LeBron escribió poco después de la final un twitter: "El Gran Hombre de allá arriba sabe cuando ha llegado mi momento. Y ahora mismo, no es mi momento". Dan Gilbert, el propietario de los Cavaliers y uno de los que han venido criticando con mayor dureza a LeBron, escribió en otro twitter: "Los Mavericks nunca han abandonado la franquicia y ahora todos han logrado el anillo. Una antigua lección para todos: no ha atajos. Ninguno". De esta forma se refería el dueño de los Cavaliers a la decisión de LeBron, hace un año, de abandonar su equipo y fichar por Miami.

LeBron ha rendido en las finales por debajo de lo habitual y especialmente en los últimos cuartos. En el último mejoró y obtuvo siete puntos, aunque de poco sirvieron. En los anteriores había sumado un promedio de 2,2 puntos en esos últimos cuartos. La mejor anotación de LeBron fue en el primer partido, ganado por Miami, con 24 puntos, luego consiguió 20, 17, 8, 17 y 21. Su media en la temporada regular fue de 26,7 puntos y su rendimiento a lo largo de los playoffs, antes de llegar a la final, había resultado sobresaliente. Pero eso, en su caso, no parece ser suficiente.