Lo nunca visto en 125cc

Se creían no sólo los más rápidos, sino también los más listos. Pero esta vez, se pasaron de espabilados, para bien del espectáculo. Y del jovencísimo piloto Marc Márquez, de 17 años, que logró su primera victoria este 2010 y ya es tercero en la general. Nico Terol y Pol Espargaró se colocaron en cabeza muy rápido. Como casi siempre. Líder y colíder del mundial de 125cc, respectivamente, querían marcar territorio. En una sola vuelta se descolgaron del resto de pilotos, a quienes aventajaban en sólo dos vueltas en más de dos segundos. Pero, como enloquecen montados a una moto, el valenciano y el catalán se enzarzaron en una batalla por el primer puesto. Y permitieron a los otros dos pilotos de la parrilla tan espabilados como ellos darles caza. Allá llegaron, a 12 vueltas para el final de la carrera, Bradley Smith y Marc Márquez, cuya sonrisa imberbe relució ayer más que nunca.

A partir de entonces, la carrera fue un auténtico espectáculo. Todos, cada uno de ellos, lideraron la carrera en algún momento. Rodaron separados por poco menos de medio segundo. Llegaron al tramo final de la prueba en un puño: 12 décimas de segundo separaban al primero (Smith) del cuarto (Terol). Y jugaron con tanto riesgo sus cartas que terminaron por relegar al británico a la cuarta plaza. Márquez, que le seguía de cerca, lo adelantó en la última vuelta. Terol, hizo lo propio con Espargaró, primero, y con su compañero de equipo después. Y Espargaró espabiló hasta colarse tercero.

Y ya van cuatro. Cuatro carreras. Cuatro tripletes. Lo nunca visto.