"¡Queremos la "chocolatina" de Forlán!"

Horas antes de que dé comienzo la final de Copa entre Atlético y Sevilla, la afición rojiblanca tiene ganadas dos cosas: la victoria moral y el apoyo de los seguidores del FC Barcelona. La hermandad con la afición culé se ve y se escucha por las calles de la ciudad condal. "¡Forza Atleti!", gritan los unos. "¡Visca el Barça!", responden los otros. Y viceversa. Y aunque muchos destaquen la cordialidad con la afición rival, la de Sevilla y Atlético están separadas varios kilómetros. La historia avala la decisión de declarar el duelo de muy alto riesgo: máxima rivalidad y la tensión, cruces de declaraciones e incluso la suspensión temporal del encuentro son algunos detalles que han adornado los enfrentamientos previos entre Sevilla y Atlético. No falta resquemor para el partido de esta noche. La decisión del Comité de Competición de levantar la roja a Negredo escuece en los miles de aficionados rojiblancos. También la cena de lujo que organizó el club andaluz en la víspera del partido. Pero la confianza en Diego Forlán supera cualquier polémica. "Queremos ver de nuevo su "chocolatina", destacan lo aficionados del Manzanares.

El protagonista de la final de la Liga Europa ha marcado 145 goles a 29 equipos diferentes, pero con el Sevilla tiene una espina clavada. Nunca ha conseguido perforar la portería de Nervión en los nueve partidos que ha disputado como jugador del Villarreal y del Atlético. La "chocolatina" sólo se verá si el delantero uruguayo consigue romper el maleficio y contribuir al primer doblete atlético desde 1996.

Camisetas de todas las épocas ilustres del Atlético, desde las del Atlético Aviación hasta las del doblete y las actuales con los dorsales de Agüero y Forlán, pueblan las calles de Barcelona. También penachos de plumas indias y banderas japonesas de la segunda Guerra Mundial, con el sol naciente pintado en rojo y blanco. Todo vale para apoyar a su equipo, aunque el descontento con la directiva de Cerezo sea evidente. "La afición se mueve por el equipo, pero no está con él. Necesitamos gestores que no sean sospechosos", destaca un aficionado. "Ojalá se gane, pero toda esta masa social no apoya a la directiva", responde otro. Los hay de todo tipo: exaltados, prudentes y supersticiosos, como el que no viste de ningún color por miedo a que dé mal fario, y la mayoría de ellos se trasladarán desde Plaza de España al Camp Nou para vivir la fiesta con su equipo a partir de las 21.30.

A las 19.00, el conjunto de Quique Sánchez Flores tiene previsto salir de su hotel de concentración hasta el estadio. En su camino hacia el décimo título copero se encontrará con la afición sevillista , dispuesta en los aledaños del estadio azulgrana para mantener alejado cualquier conato de violencia.