Pánico en Varsovia
Ante un rival menor, España sólo se salva de la eliminación gracias a Pau Gasol
España se salvó de la quema como buenamente pudo tras desplegar por momentos un juego nefasto ante un rival de medio pelo como Reino Unido. Confirmó de pleno las malas sensaciones con las que ha comparecido en Varsovia. Tras el varapalo ante Serbia, se adivinaba un día ideal para recomponer la moral y el manual de actuación que caracteriza al equipo español. Pero, tras algunas fases de acciones aceptables que le permitieron llegar a dominar por 14 puntos (62-48), el conjunto de Scariolo fue perdiendo el rumbo hasta quedar expuesto a un estropicio definitivo por parte del británico.
Con un cuadro discretísimo, con nombres de tan poco peso internacional como Hart, Renking, Lenzly, Sullivan y Achara, Reino Unido puso a España contra las cuerdas, al borde mismo de la eliminación. Faltando cuatro minutos, dominaba por 69-73. Sólo una serie de alardes individuales, un robo del balón de Rudy, un triple de Pau Gasol y otro de Navarro y, por supuesto, la falta de oficio de los británicos permitieron voltear el marcador y evitar lo que habría significado una de las mayores sorpresas de los últimos tiempos: la prematura eliminación de España.
España 84 - Gran Bretaña 76
España (25+19+22+18): Rubio (5), Navarro (10), Marc Gasol (8), Mumbrú (5),y Pau Gasol (27) -equipo inicial-, Rudy (13), Reyes (4), Raúl (0), Claver (12), Llull (0) y Cabezas (0).
Gran Bretaña (15+20+21+20): Mensah-Bonsu (6), George (0), Archibald (4), Reinking (10), Boyd (4) -equipo inicial-, Lenzly (14), Achara (7), Freeland (10), Hart (15) y Sullivan (6).
Árbitros: Robert Lottermoser (ALE), David Chambon (FRA) y Borys Ryzayk (UKR). Achara (min.34) y Lenzly (min.40) fueron eliminados por cinco faltas.
Incidencias: Partido de la segunda jornada del Grupo C del campeonato de Europa de baloncesto disputado en el Torwar Hall de Varsovia ante 2.500 espectadores. Jaime Lissavetsky, secretario de Estado para el deporte, presenció el partido en el palco.
Fue el partido perfecto para que Pau Gasol se soltara un poco y acumulara minutos de rodaje tras su largo periodo de inactividad, para que Rudy reapareciera tan enchufado como solía antes de sus últimos percances físicos, para que Ricky tomara con más soltura y firmeza las riendas del juego y para que Claver asomara la cabeza con la decisión que necesitaba. Y así fue durante algunas fases. Esta vez, Garbajosa faltó a la cita a causa de un pequeño edema en una rodilla. Las malas noticias continúan persiguiendo al grupo de Scariolo.
En principio, nadie había subrayado el partido en rojo. Pero, minutos antes de que diera inicio, una sensación de perplejidad se apoderó del ánimo español al repasar el estado de cuentas tras la victoria de Eslovenia sobre Serbia. Vista la diferencia entre ambos combinados, el peligro podía ser visto todo lo utópico que se quiera, pero no había vuelta de hoja: o se ganaba a Reino Unido o se hacían las maletas de regreso. Así de crudo y expeditivo era el panorama. Algo parecido sucedió en la primera fase del Europeo de 1999, en Francia, cuando el equipo español también tuvo un pie y medio fuera en el último partido de la primera fase. Pero Eslovenia acabó perdiendo un partido que dominaba por 20 puntos ante Francia y eso permitió que España pasara el corte y acabara llegando a la final.
En Varsovia, el drama volvió a rondar al equipo español pese a que empezó dando una sensación reconfortante, la de un alumno aplicado y humilde dispuesto a enmendar sus errores. Movió el balón con más paciencia, corrió más y mejor en las transiciones cuando lo aconsejó la situación, acertó en los triples y aseguró los primeros tiros libres. Pero los británicos, jugando siempre posesiones largas, fueron haciendo el muelle, reduciendo su desventaja de los 14 a los seis u ocho puntos. Hasta que en el último cuarto, con un equipo de meritorios, sin sus jugadores de más cartel, Bonsu y Archibald; presionando por toda la pista y buscando buenas posiciones de tiros exteriores, fundieron por momentos a los españoles, que llegaron a parecer inertes. Encajaron un parcial de 3-17 en los seis primeros minutos del último cuarto y estuvieron a un paso del desastre. Lo evitaron Pau Gasol, que concluyó con 11 rebotes y 27 puntos pese a que nuevamente falló siete tiros libres, y algunas acciones de picardía y oficio de Rudy y Navarro. España se salvó sobre la campana, pero dejó unas sensaciones tan malas como las de la derrota ante Serbia.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.