Pundonor sevillista
EL conjunto de Juande remonta con goles de Renato y Kanouté y los locales perdonan el empate en el descuento
El Sevilla tuvo que sacar su pundonor en Riazor, su aura de equipo grande, para remontar un partido que se le había complicado tras una genialidad del reaparecido Rodolfo Bodipo y que contrarrestaron Renato y Kanouté. El conjunto hispalense sufrió después de recibir el homenaje del Deportivo, con el habitual pasillo y música de Queen de fondo, por su reciente conquista de la Copa de la UEFA, la única carantoña de los coruñeses en un encuentro en el que pusieron contra las cuerdas a los de Juande Ramos.
Con rabia por la eliminación en las semifinales de la Copa del Rey ante los sevillanos y por la goleada que encajaron en Liga en el Sánchez Pizjuán, los deportivistas tenían ganas de revancha y de brindar a su afición el primer triunfo de la temporada frente al conjunto de Juande Ramos. Los blanquiazules, que salieron más concentrados que en los encuentros de Copa, disfrutaron de su primera oportunidad a los dos minutos de partido con una volea de Arizmendi que no llegó a coger portería.
El Sevilla, que templó fuerzas en el inicio del choque, comenzó a tomar el pulso al encuentro antes del primer cuarto de hora con un remate de cabeza de Escudé que Aouate desvió a córner con una excepcional intervención. La oportunidad del zaguero del conjunto andaluz despertó a los campeones de la UEFA, conscientes de que en Riazor no se podían permitir un error si querían seguir enganchados a la lucha por el título de Liga.
Una lucha en la que se pudieron meter de lleno en el ecuador de la primera mitad si Chevanton hubiera aprovechado solo ante Aouate una asistencia de Kanouté tras una pérdida de balón de la zaga deportivista. El encuentro entró entonces en una fase de intensidad y contacto en el centro del campo y de escasas aproximaciones a las metas de Aouate y Palop, quien sólo tuvo que intervenir para detener dos disparos lejanos del uruguayo Fabián Estoyanoff antes del descanso.
En la reanudación, el público de Riazor, a falta de tantos propios, celebró los de la Real Sociedad ante el Celta de Vigo en Anoeta, mientras que Juande Ramos refrescaba el banquillo para dar un nuevo impulso a su equipo. Mejoraron los sevillanos con la entrada de Luis Fabiano en detrimento de Chevanton, pero la suerte tampoco acompañó al brasileño, que, al igual que el uruguayo, perdonó otra asistencia de Kanouté y, con Aouate batido, envió alto.
Al Sevilla le empezaron a afectar los nervios en los últimos veinte minutos de partido, en los que cambió su forma de jugar para empezar a colgar balones a la desesperada desde la defensa a la línea de ataque.
Y en esas estaban los andaluces cuando un sevillano de nacimiento, Rodolfo Bodipo, que reaparecía en Riazor tras su grave lesión de rodilla, culminó una gran jugada de los deportivistas con un espectacular remate en el aire. El gol no tumbó al Sevilla, que se encontró con el empate sólo cuatro minutos después, tras una falta colgada por Duda que Renato transformó ante un fallo clamoroso de la zaga coruñesa y de Dudú Aouate.
En la recta final del encuentro, los andaluces intentaron completar la remontada para cerrar una gran semana, y lo lograron después de una jugada polémica, a falta de siete minutos para el final. La afición del Deportivo pidió córner tras un disparo de Juan Rodríguez que Palop recogió sobre la línea de fondo, y en la siguiente acción Kanouté sentenció el choque con una contra como las que condenaron a los gallegos, que pudieron conseguir el empate en el descuento, en la Copa del Rey.
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