Puerto Rico sentencia a Yugoslavia de la mano de Piculín Ortiz

Con dos tiros libres a falta de dos segundos para el final del partido, Piculín Ortiz ha rubricado esta madrugada un histórico triunfo de Puerto Rico ante Yugoslavia (85-83) en el Mundial de baloncesto. Puerto Rico será mañana (0.30) el próximo rival de España, que lidera junto a Brasil el grupo E. En el otro grupo de clasificación para los cuartos de final, Estados Unidos sigue invicto tras derrotar a Rusia con holgura (82-106), Argentina también se ha clasificado al ganar a China (95-71) y Alemania se ha impuesto a Nueva Zelanda (64-84).

José Piculín Ortiz, ex jugador de Barcelona y Real Madrid hace ya más de una década, ha exprimido toda la experiencia concentrada en 39 años para convertirse en el sorprendente verdugo de una desconocida Yugoslavia que a la improbable derrota ante España ha sumado ahora un traspié aún más grave e inesperado ante Puerto Rico. A falta de segundos y una décima para el final del partido, con empate a 83 en el marcador, Piculín se plantó ante la línea de personales, botó la pelota y, primero uno y luego otro, metió dos tiros libres históricos. Por segunda vez en los ocho mundiales que ha disputado, Puerto Rico ganaba a Yugoslavia.

La sorpresa se concretó en los minutos finales, pero empezó a fraguarse desde el inicio, con el excelente trabajo defensivo y de control del rebote desplegado por el conjunto boricua, que mantuvo a Yugoslavia tras su estela hasta poco antes del descanso, cuando dos tiros libres de Jaric dieron a los balcánicos su primera ventaja (43-42), que iba a ser la que se mantendría al descanso.

A la vuelta de los vestuarios llegó la exhibición de Yugoslavia en el tercer cuarto, que de la mano de Stojakovic y en sólo tres minutos hizo un parcial de 0-12 para adelantarse por 46-57. Tan tenacez en las duras como en las maduras, los portorriqueños no se entregaron y, lenta pero progresivamente, fueron recuperando su desventaja hasta, a poco más de dos minutos para el final, volver a superar a Yugoslavia (80-78) con un triple de Carlos Arroyo.

Fue entonces cuando, en un final de infarto trufado de aciertos y fallos por ambos partes (Divac y Bodiroga fallaron los dos tiros libres que ambos dispusieron en los últimos 49 segundos) se llegó al momento de gloria del viejo Piculín. Será mucho más mayor y menos rutilante que sus ayer rivales, pero, desde la misma posición, él no falló y sentenció a esa todopoderosa Yugoslavia que parecía llamada a jugar la final contra EE UU.

Piculín al frente (15 puntos y 8 rebotes ante Yugoslavia), Puerto Rico se enfrenta mañana miércoles (0.30, La 2) a España, que lidera el grupo E y clasificada ya para los cuartos de final pero dispuesta a mantener el primer puesto que ahora comparte con Brasil (a quien se enfrenta el jueves) para lograr un cruce más asequible hacia la semifinales.

Estados Unidos y Argentina, a cuartos

En el otro grupo, dos equipos están ya en cuartos. Se trata de Argentina, que esta madruagada ha derrotado sin mayores complicaciones a China (95-71); y Estados Unidos, también cómodo ganador ante la decepcionante Rusia (82-106). El partido no tuvo mayor historia que ver cómo los jugadores de la NBA mostraban su gran superioridad sobre Rusia, que demostró no tener en la actualidad ningún potencial ni parecerse a aquel comandado por Belov que le ganó a los estadounidenses el oro en los Juegos Olímpicos de Múnich.

Esta vez, Estados Unidos ni siquiera tuvo que pensar en la revancha de aquella polémica derrota. Los jugadores de la NBA, encabezados de nuevo por el alero de los Celtics de Boston, Paul Pierce (27 puntos), apenas tuvieron que exhibir algunas de sus armas para asegurar el triunfo y mantenerse imbatidos. Junto a Pierce, el base Andre Miller aportó 18 puntos y el ala-pívot Antonio Davis logró 13 y seis rebotes. "Hemos jugado el partido más consistente del torneo y aunque todavía tenemos que hacer mejor defensa, al final las cosas salieron desde el principio como queríamos", indicó tras el partido el entrenador de Estados Unidos, George Karl.

Estados Unidos y Argentina lideran el grupo, con ocho puntos cada uno. Les siguen Alemania (siete), tras ganar esta madrugada a Nueva Zelanda (64-84), que es cuarta, con seis puntos. Rusia y China cierra en grupo, con cinco puntos.