Mujeres maduras, en crisis y reivindicativas de su sexualidad
‘Déjate llevar’ es una serie creada, dirigida y protagonizada por Leticia Dolera para Movistar +
Tres mujeres que se enfrentan a un cambo súbito de sus vidas. Romper moldes, afrontar una realidad distinta de la prevista, redescubrir el cuerpo y una nueva sexualidad y explorar experiencias desconocidas. Ese el cóctel que propone la serie Déjate llevar, de Movistar +, cuyo rodaje terminó en Barcelona a finales de noviembre. Una propuesta con fondo y forma feminista que parte de una idea de Leticia Dolera, quien, además de guionista, es directora y encarna a una de las protagonistas de esta serie de ocho capítulos de 30 minutos que se emitirá en 2019.
La producción tuvo que lidiar con una polémica pública hace unas semanas. La actriz Aina Clotet denunció que Dolera renunció a contratarla para encarnar uno de los personajes por estar embarazada. Dolera atribuyó la semana pasada la controversia con Clotet a “un error de comunicación”.
“Los personajes femeninos rompen con las reglas del sistema patriarcal de lo que se espera que sea una buena madre, una buena esposa y, además, una excelente profesional. Son mujeres que cometen errores, contradictorias y que toman la iniciativa en el terreno sexual”, explica Dolera, sin desvelar el hecho “de impacto” que ocurre en el primer capítulo y que cambia la vida de las tres protagonistas. Son mujeres, cerca de los 40, que por distintos motivos entran en crisis y se plantean si su vida tiene que ser así o no. Si realmente han hecho lo que querían o han seguido pautas establecidas.
Dolera encarna a María, una mujer con todo claro y decidido —qué iba a estudiar, con quién y en qué momento se casaría—, controladora hasta la exasperación, cuyos planes se tuercen cuando su novio la abandona.
Con María convive su hermana Esther, interpretada por Aixa Villagrán, cumple 40 años frustrada por no ver cumplido su sueño de ser una pintora reconocida. “No vendo ni un cuadro y trabajo en el Museo de Cera de Barcelona, no me gusta la vida que llevo y busco una salida a base de juergas, drogas, bebida y chicas jóvenes para follar”, resume la intérprete.
La tercera protagonista es Cris (Celia Freijerio), quien también se viene abajo pese a que, en teoría, sus expectativas se han cumplido sin problemas. “Soy abogada, tengo un marido, dos hijas, una casa preciosa, pero…”, indica la actriz, que fue la última en incorporarse al proyecto en sustitución de Clotet. La discusión creada por la sustitución de esta última no ha afectado a Freijerio, cuyo personaje redescubre su cuerpo y su sexualidad en varias secuencias muy explícitas.
“Hay bastante sexo entre mujeres, también de un matrimonio que llevan tiempo juntos, otras escenas un poco más locas y también entre discapacitados”, señala Dolera.
Déjate llevar muestra dos universos que en un momento dado se relacionan: el de las tres mujeres y el de personas con algún grado de discapacidad intelectual. “Nunca se les suele ver en el cine o en la tele y son personas que existen y tienen sus vidas”, defiende la cineasta, quien tiene un hermano discapacitado.
“El tratamiento que hace la serie de esa cuestión es positivo, de superación. De personas independientes y autónomas. Mi personaje [Xosé] es un orientador social en un piso compartido entre personas con discapacidad intelectual”, explica el actor Manuel Burque, quien ha sido también coguionista a petición de Dolera. Aunque apunta que su registro se sale del humor, más habitual en él, adelanta que en Déjate llevar hay momentos para todo, incluso para la risa: “Yo la defino como una comedia emocional”.
3 directoras para 8 capítulos
'Déjate llevar' ha tenido tres directoras: Leticia Dolera, Elena Martín y Ginesta Guindal. La presencia femenina es en esta serie mayoritaria y un 70% de los cuadros técnicos –incluidas las jefaturas- han sido ocupados por mujeres. "Algo que no es nada frecuente porque, además de la dirección, hay otras áreas, como fotografía y cámara, en las que no hay muchas mujeres. Es un problema estructural que arranca en las escuelas de cine", explicaba Martín que tiene experiencia como directora (Júlia Ist, 2017): "Para mí es muy interesante explicar una historia que no es mía, que no la he pensado yo". Dolera quiso que la dirección fuera compartida y llamó a Martín y Guindal que dirigirán cada una de ellas dos capítulos de la serie y Dolera los otros cuatro. "No deja de ser curioso dirigir a la que es la principal directora porque es ella la que tiene toda la historia en la cabeza y, a la vez, es útil porque puedes contrastar cómo se quiere contar la historia. Ha funcionado muy bien", añadía Martín. Guindal, realizadora y profesora de cine, que se estrena en la televisión con este proyecto, subrayaba la "mirada feminista en todo lo que explica la serie, especialmente las escenas de sexo".
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