_
_
_
_

11 series que deberían acabar cuanto antes

'The Big Bang Theory' renueva hasta su duodécima temporada y 'Modern Family' prepara la novena. ¿Tienen que desaparecer?

"Vive rápido, muere joven y deja un bonito cadáver". Hay series que deberían haberse tatuado en sangre esta frase de la película Llamad a cualquier puerta. Con 30 temporadas planificadas, Los Simpson ha pasado de ser la sitcom más original de la televisión, la que influyó a todos lo que vinieron después, a ser un anciano repetitivo y sin gracia. No sabemos cuál fue el momento exacto en el que saltó el tiburón, pero hoy todos tenemos claro que no supo morir a tiempo. La serie de Matt Groening  la incluimos en nuestro primer ránking de series que deberían haber acabado, allá por 2012, y vuelve a este con algunas de sus antiguas compañeras y nuevas adiciones. Ficciones que no supieron poner un fin y darse cuenta de que su historia ya había dejado atrás su mejor etapa. Cuando pasas de las cinco temporadas, échate a sufrir. ¿Alguien llegó al final de CSI? Pues eso. Estas son las series a las que hace tiempo se les pasó el arroz.

Los Simpson

Los Simpson dejaron de ser Los Simpson en algún momento indeterminado hace 15 años o así. Desde el mismo momento en el que dejamos de destacar grandes momentos. Todos recordamos ese capítulo con el homenaje a El Resplandor ("sin tele y sin cerveza Homer pierde la cabeza"), el del tren elevado, el de Homer en el espacio, el de Australia o aquel en el que el actor secundario Bob pisaba casi de forma infinita un rastrillo y le daba un mamporro en las narices. Pero, ¿quién recuerda algo de, pongamos, las últimas cinco o siete temporadas? Es preferible volver a ver los momentos gloriosos en las interminables reposiciones que seguir estirando un chicle en el que ya prácticamente a la familia amarilla no le queda ninguna situación que vivir, a menos que hicieran algo totalmente transgresor. Dejen descansar a Los Simpson (y de paso a Padre de Familia y el trillado universo MacFarlane).

The Big Bang Theory

No pueden ser siempre los eternos jóvenes frikis que aman la ciencia, aunque haya bodas y embarazos de por medio. Después de 10 temporadas (y al menos dos más aseguradas, además del spin-off del joven Sheldon), los chistes y situaciones de este grupo de amigos suenan a repetidos. Y la culpa quizá no sea de los últimos años, sino que la serie no supo evolucionar a partir de mucho antes, cuarta o quinta entrega. Sí, se ve con facilidad y sí, saca sonrisas, pero todo está ya demasiado manido.

The Affair

El juego de la narración a dos bandos y, posteriormente, a cuatro bandos de las consecuencias de una aventura amorosa funcionó muy bien durante dos temporadas con las que la serie de Showtime acaparó elogios y sorprendió a los espectadores. Sin embargo, la obsesión por alargar una historia que ya se ha contado (de aquel affaire ya solo quedan los rescoldos) a partir de personajes que se terminan haciendo cansinos fue un lastre tremendo para la tercera entrega de una serie que debería haber terminado a tiempo en vez de estirar un chicle ya sin sabor. ¿Nos estamos apresurando a pedir su final tras solo tres temporadas? Quizá, pero no todas las series necesitan llegar a las cinco, seis o diez temporadas. A veces con una o dos es más que suficiente.

Nashville

A la serie ambientada en el mundo de la música country ya le llegó su hora. De hecho, en ABC lo vieron claro y la temporada pasada la cancelaron tras llevar ya bastante tiempo dando tumbos. Pero es una de esas series que se hacen querer, y el movimiento en las redes llevó a la cadena CMT, especializada en música country, a repescarla y hacer otra temporada más. El resultado está siendo una serie de esas que ves por inercia y, al menos en los últimos capítulos emitidos, para hincharte a llorar a gusto. Muy lejos ha quedado ya la pelea de gatas entre Juliette y Rayna que tanto nos divertía en la primera temporada o las tensiones sexuales no resueltas (ya se han resuelto todas varias veces). Y que se marchen según qué personajes y no lo haga Scarlett tiene delito... Ya es tarde para pedir un final digno para Nashville. Ahora solo pedimos un final.

Modern Family

La que fuera la gran comedia de la televisión está pendiente de renovar para su noveno año cuando se cierren sus millonarios contratos con sus repartos. Si acabara ahora dejaría un bonito cadáver, aunque no creemos que ABC pueda permitírselo todavía. Al final de este año, Manny y Luke se graduarán y se pondrán camino a la universidad, así que, después de la salidas de Haley y Alex, cada vez se hace más difícil justificar cómo meten a los jóvenes en cada episodio. A este paso acabaremos viendo a Lily casada y con hijos. Ed O'Neill ya estuvo en esta tesitura antes. Todo por vender tantos episodios como puedan a sindicación

Homeland

Algunos dicen que debería haber acabado cuando (¡spoiler!) murió su protagonista, pero Homeland ya está renovada otros dos años más. Tras la irregular, inverosímil y perdida sexta temporada, corremos el riesgo de acabar odiando a Carrie Mathison (Claire Danes) más incluso de lo que ya lo hacemos (en un efecto similar al de Orange is the new black), ¿qué giro de guion pueden dar para refrescar la serie y que no parezca todo tan loco? ¿De verdad podemos seguir viéndolos sufrir tantos años más?

Once Upon a Time

Érase una vez nunca fue una serie llamada a cambiar el panorama televisivo, pero empezó bien y continuó con suficiente chicha como para dar momentos divertidos. El concepto de un pueblo donde aparecen todo tipo de personajes de los cuentos, al fin y al cabo, tiene mucho donde rascar. Pero tras seis temporadas y un spin-off de Alicia quizás vaya siendo hora de cerrar Storybrooke. Hemos tenido Blancanieves, Frozen, el Mago de Oz, Pinocho, Peter Pan, Beowulf, Frankenstein y al Rey Arturo, ¿quién más puede quedar? ¿Qué otros flashback pueden tener los ya manidos? De momento, la idea que se baraja es quedarse con solo algunos de los personajes como secundarios (los contratos acaban) y presentar una nueva historia, pero para eso ABC y Disney deberían dar luz verde a una nueva temporada, y así seguir haciendo crecer este imposible árbol genealógico de cuento de hadas.

Agents of SHIELD

La primera serie de Marvel en televisión, con protagonista e invitados directamente venidos del cine, es también una de las peores producciones que jamás ha realizado la compañía. Hasta Joss Whedon, que dirigió el piloto y dejó a su hermano a los mandos, se desligó de este desaguisado en el que nunca acabaron de engancharnos los personajes ni su química. Uno de los mayores problemas: que no pudieran jugar con libertad en el universo Marvel. Ya podían presentar a Los Inhumanos, El Motorista Fantasma o la identidad comiquera secreta de algunos de los miembros, que nada lograba reanimar un equipo insulso. Y ahora vamos con una realidad paralela. La quinta temporada no está asegurada todavía. Quizás lo mejor sería matarla a tiempo, e ir directamente a otras cosas como Inhumanos, Capa y Puñal y Runaways.

True Detective

HBO sigue sin decidirse con esta serie, que no está muerta del todo pero tampoco renovada. De cuando en cuando salen rumores en uno y otro sentido. Ayer mismo, por ejemplo, se supo que Nic Pizzolatto tiene dos episodios escritos y que en el equipo está también el veterano David Milch (Deadwood, NYPD Blue). Pero el hecho es que el desaguisado de la segunda temporada ya debería haberles servido para aprender. Por otra parte, precisamente el fracaso de la temporada que protagonizaron Colin Farrell, Vince Vaughn, Rachel McAdams y Taylor Kitsch podría servir de incentivo a la cadena para dar un golpe en la mesa y hacer una tercera temporada en condiciones para cerrar en alto. Pero, ¿por qué obsesionarse con retomar algo que ya está finiquitado en vez de centrar los esfuerzos en algo nuevo y sin mancha? En cualquier caso, True Detective es el ejemplo claro de que hay series que no necesitan ir más allá de una sola temporada.

Anatomía de Grey

13 temporadas (¡13 temporadas!) lleva ya a sus espaldas la serie de Shonda Rhimes con idas y venidas, sus tramas locas y sus muertes más locas aún. No es complicado imaginar por qué esta serie debería haber terminado hace tiempo. Pero también es verdad que es una serie que sigue teniendo muchos fans, unos seguidores que cada vez que ocurre algo (una muerte, normalmente), salen hasta de debajo de las piedras mientras que el resto del tiempo están ocultos sin atreverse a manifestarse como fans de Anatomía de Grey. La definición perfecta del placer culpable. Shonda, ¿y si fuéramos pensando en cerrar el Seattle Grace y dar a sus médicos un descansito?

Cuéntame cómo pasó

Y si en Anatomía de Grey nos escandalizábamos con las 13 temporadas que llevan, qué no decir de las 18 con las que cargan los Alcántara. Es conocido el viejo chiste que dice que un día nos alcanzarán y contarán lo que estamos viviendo ahora mismo. ¿Qué más cosas les pueden pasar a Antonio, Mercedes, Carlos, Toni y compañía? Ya es casualidad que estén envueltos en todos los acontecimientos importantes de la historia reciente de España... Quizá, solo quizá, va llegando el momento de separarse de ellos. Si no un día acabarán viendo Cuéntame ellos mismos.

Otras

Pero este selecto grupo no es el único. Los procedimentales episódicos tienen más fácil alargar sus series sin final en mente, pero hay alguna que debería pensar en dejar espacio para otras más jóvenes. La serie central de NCIS (Navy: investigación criminal) lleva 15 temporadas con un reparto bastante estable, y sus spin-offs van camino a lograrlo; el remake de Hawaii Five-0 suma ocho y Mentes criminales supera los 12 con tantos jefes protagonistas que hemos perdido la cuenta. Tampoco a los hermanos Winchester de Sobrenatural parecen acabárseles las historias fantásticas tras 13 años donde ha pasado absolutamente de todo. Cuidado también con series como Broadchurch, que, cuando terminan con su caso central, tienden a perderse en otros argumentos y misterios menos interesantes. Y algunas como 24: Legacy y Prison Break son tan valientes de volver con temporadas mediocres cuando ya sus antecesoras fueron alargadas sin razón alguna.

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo

¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?

Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.

¿Por qué estás viendo esto?

Flecha

Tu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.

Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.

En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.

Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_