Extraña programación

Domingo. Casi medianoche. Termina en La1 el programa especial de Operación Triunfo: El reencuentro, sin duda uno de los éxitos televisivos de este tercio final de año. Y un buen salvavidas para que TVE celebre estos días sus 60 años con un programa con gran audiencia. Y justo después empieza El baile de los ángeles, un docurreality sobre Kidz On The Block, un grupo de 24 niños de Palma de Mallorca que bailan bien y mucho y que se han clasificado para el Campeonato del Mundo de Street Dance de Los Ángeles (EE UU). Un monumental logro para estos chavales que dedican muchas horas a la semana para entrenar. Una historia interesante y bien contada, con sus momentos de superación y sus situaciones tiernas. Un programa decente e incluso didáctico, que es ideal para que los niños vean que se pueden divertir y esforzar a partes iguales para lograr un gran objetivo.

Lástima que en TVE solo hayan pensado en intentar enganchar a los que terminan de ver Operación Triunfo antes que pensar en el verdadero público al que debería ir dirigido este programa: niños entre 8 y 15 años, que además podrían verlo junto a sus padres, en familia. ¿Se debe esta extraña programación a intentar enganchar espectadores? ¿Se puede permitir la televisión pública programar este espacio a esas horas y realmente le compensa?

En sus dos primeros capítulos (de tres, el tercero se podrá ver el domingo 30 a medianoche, mantengan despiertos a sus hijos viendo OT con Nina) el programa rozó cada día casi el millón de espectadores. Dudo que muchos fueran niños. ¿Y si lo programaran el domingo por la tarde en vez de una de esas insulsas películas alemanas cuya audiencia no es muy superior? Por favor, un poquito de riesgo no vendría mal. Es solo un poquito. Una pequeña apuesta de la televisión pública por cuidar mejor a su público y a sus programas.