La Moncloa se juega también en la televisión

Otra vez los partidos están en precampaña y, otra vez, acaparan el horario televisivo de máxima audiencia. En el camino hacia las elecciones del 20-D, además de los habituales debates, los principales candidatos se lanzaron a otros formatos de entretenimiento que antes no frecuentaban. Aunque en los meses transcurridos desde entonces los políticos no han desaparecido de los informativos, ahora sus rostros vuelven a hacerse casi omnipresentes en el horario de máxima audiencia.

Casualidad o no, Telecinco y Antena 3 estrenan esta noche sendos programas con los aspirantes a La Moncloa como protagonistas. Y, casualidad o no, ambos arrancan con Pablo Iglesias. El secretario general de Podemos asegura buenos datos de audiencia, como ya ocurrió el pasado viernes con el estreno de Feis tu feis, el nuevo programa de Joaquín Reyes, que con Iglesias como invitado atrajo a 1.366.000 espectadores en Cuatro.

Telecinco abrirá la noche (21.45) con 26J. Quiero gobernar, en el que niños de entre 5 y 12 años se transformarán en entrevistadores de los candidatos. “Cuando los niños preguntan, los políticos no pueden mentir y deben ser lo más didácticos posible”, explica Ana Rosa Quintana, moderadora de estas peculiares tertulias en las que los menores preguntarán libremente y sin que hayan sido avisados de que tienen ante sí a un posible futuro presidente.

Se darán situaciones curiosas, como pequeños que piensan que el logo del PSOE con el puño y la rosa es una señal que prohíbe cortar flores, o una niña que simpatiza con el PP porque el azul es su color favorito. “Hacen preguntas que nunca antes se han hecho a los políticos, y a su vez, ellos explican las cosas con mucha sencillez”, añade Quintana sobre este nuevo formato de 40 minutos, por el que pasarán tras Iglesias sus oponentes del PP (Mariano Rajoy), PSOE (Pedro Sánchez) y Ciudadanos (Albert Rivera).

La noche seguirá en Antena 3 (22.30) con el regreso de Dos días y una noche, donde Susanna Griso pasará ese tiempo también con los cuatro candidatos. Abre la tanda, de nuevo, Iglesias. “Hice las gestiones personalmente y todos decían que sí, pero que estaba el problema de la agenda. La solución fue viajar con ellos a donde estuvieran y seguir su día a día, por lo que hay una parte más personal y otra de precampaña”, explica Griso.

La presentadora destaca cómo el líder de Podemos gestiona su vida íntima y cómo mide su exposición en los medios. De Rajoy resalta su cercanía: “Está de vuelta de todo y eso se nota en el trato personal”. Sobre Sánchez incide en la importancia de la vitalidad que le inyecta su esposa, Begoña. Con Rivera dice haberse llevado la mayor sorpresa: “No le importa mostrar sus debilidades. Busca la perfección desde la imperfección”.

Tanto Quintana como Griso ven natural que los políticos españoles busquen en televisión llevar su discurso a un electorado más amplio y con un lenguaje diferente. “La gente no solo quiere conocer el programa, sino también saber cómo son. En países como EE UU es habitual que salgan incluso en sitcoms”, recalca Quintana. “El interés por la política nos ha llevado a querer conocer cosas que no nos habíamos planteado. Creo que los políticos piensan que esta vez, el programa ya está contado. Sus equipos tienen claro que personalizar la campaña suma o resta”, tercia Griso.