IVAM, una colección fénix

Algunos cadáveres, por exquisitos, consiguen ser reanimados. Es el caso del IVAM. Después de una década criando malvas, su colección brilla de nuevo para reivindicarse a través de una exposición que abarca los años más fatídicos de Europa pero sin duda más fructíferos artísticamente. la muestra Construyendo nuevos mundos (1914-1945) es también una declaración de intenciones del nuevo director, José Miguel G. Cortés, pues en ella descubre los ejes que articularán su trabajo en la institución valenciana.

A la vista de las obras expuestas, uno se ve obligado a recordar aquel primer y prestigioso IVAM durante el mandato de Carmen Alborch y Vicente Todolí (1989-1994), verdaderos artífices de un inusual y ambicioso proyecto museístico. Tras aquel paréntesis, el centro perdió su sentido público, su rumbo, y optó por un cierto dandismo decadente, cuando no sirvió maliciosamente a intereses particulares. Pues bien, bajo aquel magma aborrecible, que duró demasiado, se ha desenterrado un patrimonio artístico de primera, capaz de explicar medio siglo de arte español, con sus correlatos internacionales. El trabajo de Cortés será provechoso sólo si es capaz de enriquecer lo heredado y atraer el mimo de las Administraciones públicas y espónsores privados.

Casi mil obras, entre dibujos, fotografías, collages, pinturas, esculturas y cine, se despliegan por 10 salas en bloques temáticos. En el primer espacio se citan Man Ray, Marcel Duchamp, Picabia y René Clair. Son relevantes los filmes Cine anémico (1926) y Entreacto (1924), que se exhiben al lado de rotorrelieves, radiografías y otros ingenios dadá. El IVAM cuenta con un importante archivo de publicaciones y documentos de la época futurista, expresionista, constructivista y surrealista. Se han seleccionado los más valiosos, la mayoría vinculados a un arte de propaganda, de crítica social y compromiso político, que acompañan a los fotomontajes y fotografías de Rodchenko, Heartfield, Renau y Grete Stern, las construcciones en madera de Torres García, pinturas de Miró, y películas de Buñuel, Eisenstein y Chaplin. Una novedad museológica es la sala dedicada al diseño y la arquitectura, con 40 piezas de la colección Alfaro Hofmann y obras representativas de la Bauhaus. La muestra desemboca en los nuevos lenguajes de la modernidad, que tienen más que ver con el dinamismo y los juegos ópticos que con el realismo y el significado estable de las formas.

Como corresponde a las grandes colecciones, la del IVAM dará en lo sucesivo muchas vueltas y quizás revueltas.

Construyendo nuevos mundos, 1914-1945. Colección IVAM. Valencia. Hasta el 10 de abril de 2016.