Polémicas bajo la alfombra de TVE
La cadena elimina parodias de Rajoy en la reemisión de ‘La hora de José Mota’
Esta ha sido una semana negra para TVE. Los periodistas de la cadena pública presentaron el martes en el Parlamento Europeo un informe en el que denunciaban la “manipulación progubernamental” que están sufriendo los servicios informativos. Al mismo tiempo, en Prado del Rey se acrecentaba la polémica por la eliminación de una parodia sobre el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, en la repetición del programa de humor de José Mota que emite La 1.
La televisión pública tiene otros flancos abiertos. El primero afecta al show que produce José Luis Moreno para la noche de los sábados: un formato de variedades más propio del siglo pasado que ha resultado ser un rotundo fracaso. Los directivos de la pública podrían enrollar La alfombra roja al no haber alcanzado la cuota mínima de audiencia pactada. Además, TVE ha puesto en práctica a la hora de estrenar algunas series estrategias propias de los operadores privados: la emisión simultánea del capítulo inicial en varios canales, una fórmula que busca mejorar los datos de audiencia pero que menosprecia los intereses de los espectadores.
Manipulación, censura y derroche de fondos públicos son algunas de las acusaciones que pesan sobre la televisión pública. A este clima ha contribuido la eliminación de algunos sketches en la reemisión del programa La hora de José Mota en los que aparecía el humorista parodiando a Mariano Rajoy, además de otros vídeos con imitaciones de María Teresa Fernández de la Vega o el rey Juan Carlos. Algunos espectadores echaron de menos esos gags y las críticas no han tardado en extenderse.
Según fuentes de TVE, la supresión de algunas parodias se debe a que habían quedado obsoletas. “Esto se había hablado con José Mota hace tiempo y se decidió suprimir los gags anticuados, es decir, algunos en los que Rajoy aparece como líder de la oposición; Fernández de la Vega como vicepresidenta o Juan Carlos I era el rey de España. Al ser un programa de 2010, ver ahora estas situaciones podía resultar extraño”, explican desde la cadena pública. También recalcan que en la web de RTVE se puede ver los programas de forma íntegra.
El portavoz socialista en la comisión de control parlamentario de RTVE, Germán Rodríguez, discrepa de esta versión. “En el consejo de administración, la explicación que se dio es que durante el periodo electoral se retiraban las parodias con alusiones políticas”, explica Rodríguez, que califica de “censura” la eliminación del vídeo en el que se remedaba a Rajoy cantando las promesas electorales del PP. “Estábamos acostumbrados a la censura en los informativos pero es inaceptable que también se aplique a los programas de humor”, añade.
Otro espacio salpicado por la polémica es La alfombra roja, un formato contenedor de tres horas en el que caben actuaciones musicales, concursos de talentos, entrevistas a famosos, monólogos de humor, piezas de ficción con un toque costumbrista y una sección denominada ‘Sueño imposible’ en la que una persona corriente cambia de imagen para sorprender a su familia y amigos. Su paso por La 1 en el horario estelar de los sábados ha estado muy por debajo de las expectativas. Debutó con una cuota de pantalla del 5,8% (843.000 espectadores) y en las sucesivas semanas apenas ha mejorado. La siguiente entrega obtuvo un 6% (816.000) y la tercera un 6,1% (736.000).
A expensas del dato de ayer, La alfombra roja podría estar saliendo de la parrilla de TVE. La cadena tiene la opción de cancelar su emisión sin ningún tipo de penalización al no haber alcanzado el share (cuota de pantalla) pactado por TVE y la productora de Moreno. Según fuentes de la corporación, en la propuesta de contrato entregada al consejo de administración se establecía una audiencia de corte del 12,5%. Si durante cuatro emisiones consecutivas estaba por debajo de esta cuota, TVE podría rescindir el contrato (220.000 euros por entrega, según fuentes de la corporación) sin coste alguno. Rodríguez percibe que los mediocres resultados se deben a que es un programa caduco: “No está en línea con sociedad española”.
Con la intención de reforzar sus dañadas tardes, y tras reconocer el fracaso de audiencia que supusieron los anteriores magazines vespertinos, TVE ha decidido apostar por la ficción nacional para la sobremesa de La 1. Ese refuerzo llega con los estrenos de Acacias 38 (la semana pasada) y Seis hermanas (el próximo miércoles). Ambos arrancan en el horario nocturno para, a partir del día siguiente, desplazarlas a las 16.30. Sin embargo, llama la atención que la presentación se realice de forma simultánea en La 1 y La 2.
La cadena justifica este hecho como una cuestión estratégica. “Es una forma de exponer a los espectadores de las dos cadenas unas series por las que apuesta el canal”, explican fuentes de TVE. El resultado es que los espectadores de La 2, un canal que se caracteriza por tener unos formatos diferentes e incluso más especializados, se han encontrado en la noche de dos miércoles con la misma oferta que la primera cadena. “Si se pensara que es una decisión que perjudica al espectador, no se haría”, añaden desde TVE. Estas estrategias son habituales en los canales privados, pero la pública solo lo ha utilizado durante la emisión de los principales telediarios, que se difunden simultáneamente en La 1 y Canal 24 Horas.
En el caso de Acacias 38 las cifras no han acompañado: en La 1 fue seguida por 1.586.000 espectadores (8,0%), datos que, tras sumarles la audiencia de La 2, subieron hasta 1.937.000 (9,7%). Es decir, La 2 sólo aportó a la serie un 1,7% de cuota de pantalla.
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