Fue el “niño bonito” de Miles Davis. Uno de los pocos que nunca se plegaron a los designios del gurú Wynton Marsalis, el trompetista estadounidense. Él pertenecía al otro bando, el de los malencarados, los que no se ponían un traje de chaqueta con corbata ni jartos de whisky (entre ellos Steve Coleman, Wallace Roney...). Consuela comprobar que, pasado el tiempo, Kenny Garrett sigue fiel a sí mismo y a sus graciosas boinas de mercadillo afro. Incluso esboza de cuando en cuando una sonrisa, como en la portada de este disco.
Género: Jazz
Título: 'Seeds from the underground'
Sello: Mack Avenue, Distrijazz
Año: 2012
Puntuación: * * * *
Su música, la que interpreta en Seeds…, es una carrera de resistencia a través de la cual pretende rendir homenaje a sus maestros: Jackie Mclean, Roy Haynes, Marcus Belgrave (trompetista y maestro de trompetistas), Keith Jarrett y Christian Laviso (guitarrista, originario de Pointe-à-Pitre, en la isla de Guadalupe). Sí, pero… puestos a sacarle parecidos, la actual música de Garrett evoca el clima convulso y poderoso de los discos –verdaderas obras maestras- que el pianista McCoy Tyner grabó en los años setenta (Enlightenment o Atlantis). Excepcionalmente, el saxofonista se da un respiro en piezas como Haynes here, todo lirismo, o la cinematográfica Detroit. Arropando al líder de la sesión, un quinteto sólido como el Real Monasterio de El Escorial, incluyendo a una cantante de extraño nombre: Nedelka Prescod.
Valoración: 0 ABERRANTE, el mundo sería mejor sin él; 1 PRESCINDIBLE, nadie se acordará de él; 2 PASABLE, para incondicionales; 3 ACONSEJABLE, en su estilo merece la pena; 4 INDISPENSABLE, un éxito asegurado; 5 OBRA MAESTRA, uno entre un millón.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.