5 fotosBotero engorda a JesucristoBotero engorda a Jesucristo 28 oct 2011 - 22:07CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceBotero vuelve a Nueva York cuatro años después de presentar en esta ciudad sus pinturas sobre las torturas de presos musulmanes en la cárcel iraquí de Abu Grahib, dirigida por Estados Unidos.Botero traslada el martirio de Jesús a escenarios contemporáneos. En este cuadro, por ejemplo, sustituye al legionario romano y su látigo por un policía latinoamericano con una porra.En esta obra Jesús aparece colgado y apuntalado en la cruz en medio de Central Park, con los neoyorquinos paseando plácidamente y el perfil de los rascacielos de la ciudad de fondo.Botero retrata la tragedia del Vía Crucis con su tradicional sentido del humor, combinando elementos incongruentes como en esta pintura: los buitres carroñeros comiendo un trozo de carne, el perro que los observa, las casitas humildes que recuerdan a un barrio pobre de Medellín, su ciudad natal, la elegante mano que señala a Jesús y la cara de escepticismo de este, maniatado con una cuerda. Una composición surrealista que puede hacer reír o puede hacer reflexionar sobre las injusticias que unen los tiempos de Cristo con los tiempos modernos.En la esquina izquierda de este cuadro, abajo, aparece un autorretrato de Fernando Botero con un gesto de gran interés por el beso traidor de Judas a Jesús.