8 fotosParís is not deadParís is not dead 26 ene 2011 - 19:44CETWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceAdemás de tender un puente entre Londres y París, la colección explora, una vez más, las obsesiones de Jean Paul Gaultier. Por ejemplo, la ambigüedad y los estereotipos sexuales. Este traje masculino está realizado en organza transparente y después totalmente cubierto por pasamanería en color negro y beis.AFPA pesar de las crestas de mohicano y de las ocasionales tachuelas, los diseños son fundamentalmente muy elegantes y pulidos. La rebeldía punk viene por la falta de complejos con la que los clásicos se reformulan. Por ejemplo, un vestido de cóctel negro que se abre en franjas verticales, ganando sexualidad sin perder su valor de simplicidad geométrica.AFPLos corsés son una de las señas de identidad de Jean Paul Gaultier. Los que diseñó para la gira Blonde Ambition de Madonna son uno de los hitos de su carrera. En esta ocasión reformuló esta pieza de lencería antigua alargándola por detrás hasta convertirla en un vestido asimétrico. La parte delantera se mantiene corta y se abre sobre unos pantalones. Un nuevo contraste entre los códigos de lo maculino y lo femenino. Volantes de can can de Chantilly a tono con el pantalón cubren el interior del vestido-corsé azul marino.AFPLas modelos llevaban el número de su salida en la mano, siguiendo con el juego de recuperación del formato clásico de presentación de la alta costura. Sobre la pasarela, juguetearon con él. Farida Khelfa, por el ejemplo, le lanzó el suyo a Inès de la Fressange. Este vestido se llama La Vie Parisienne y está realizado en seda estampada.APLas referencias al punk ya eran evidentes antes de que el primer diseño saliera a la pasarela. La música de The Clash amenizaba la espera y el público se organizaba en zonas bautizadas según calles londinenses. Su irreverencia también dejó huella en los diseños. Este vestido se llamó Too Fast To Live Too Young To Die y es al mismo tiempo un mono y un traje largo de noche.AFPUn símbolo del estilo francés como la gabardina jugó el papel que habitualmente Jean Paul Gaultier reserva al esmoquin. Lo remodeló sin piedad y, teñido de fucsia, lo conviertió en un vestido de noche.APEl modelo del momento es Andrej, un joven de delicadas facciones y aspecto asombrosamente femenino. Jean Paul Gaultier fue uno de los primeros en subirlo a una pasarela (en julio). Además, protagoniza la campaña publicitaria del diseñador para esta primavera. Para esta colección, le convirtió en La Novia. La figura que, tradicionalmente, cierra los desfiles de alta costura.AFPUna bailarina del Crazy Horse cerró el desfile. Al levantar su falda de can can descubrió un chiste en forma de trampantojo. Piernas levantadas cubrían la pieza de forma que parecía estar rodeada por ellas. Estalló la música y los aplausos. La pantomima continuaba con la bailarina cayendo aparatosamente frente a Deneuve y Almodóvar y también frente a los fotógrafos.AFP