Maillol alcanzó su fama con figuras y terracotas de pequeño formato realizadas alrededor de 1900. En ellas, se anticipa al "retorno al orden" que cuajaría después de la revolución cubista.MARCEL·LÍ SÀENZVersión en bronce de "La Mediterránea" (1905), sin lugar a dudas la escultura más universalmente famosa de Maillol. Refleja al máximo el peculiar clasicismo moderno del artista.MARCEL·LÍ SÀENZLa exposición presenta también esculturas de gran formato fuera de las salas de exposición. Este desnudo de matiz neoclásico, realizado en plomo en 1921, es una de las obras con más impacto de la muestra y se encuentra en uno de los patios interiores de La Pedrera.MARCEL·LÍ SÀENZDos versiones de un mismo tema. A la izquierda, "La Ola" (1891), uno de los cuadros más conocidos del periodo simbolista con reminiscencias art nouveau. A la derecha, uno de sus primeros bajorelieves, del mismo título que el cuadro pero realizado cinco años después, en los que ya empieza a aparecer su celebrado clasicismo y las formas rotundas que le caracterizan.MARCEL·LÍ SÀENZ
