9 fotosLuces y sombras de Maíno en el PradoLuces y sombras de Maíno en el Prado 16 oct 2009 - 17:08CESTWhatsappFacebookTwitterLinkedinCopiar enlaceLa muestra, patrocinada por la Fundación Amigos del Museo del Prado, estará abierta hasta el 17 de enero. Zugaza ha descrito a Maíno como un artista, "original", "sofisticado", "moderno" y "elegante", que llega al Prado con el otoño, "tras el resplandor" veraniego Sorolla.JUAN BAUTISTA MAÍNOMaíno nació la villa alcarreña de Pastrana en 1581. Pasó su adolescencia en Madrid y, hacia finales del siglo XVI, pasó a Italia, donde tendría una decisiva formación pictórica vinculada a las dos grandes corrientes generadas en la Roma de hacia 1600: el revolucionario naturalismo de Caravaggio y la revisión del clasicismo italiano de Annibale Carracci y la escuela boloñesa.JUAN BAUTISTA MAÍNOEl artista vivió en primera persona toda esa confluencia de aportes y estilos, y así lo manifiesta su pintura, caracterizada por un dibujo vigoroso y descriptivo, la monumentalidad escultórica de sus figuras, trazadas con una iluminación contrastada e intensa y un colorido vivo y saturado, con profusión de amarillos, ocres, azules cobaltos y bermellones.JUAN BAUTISTA MAÍNOEl director adjunto del Museo del Prado, Gabriele Finaldi, ha subrayado sus "dotes poderosas" como "colorista" y retratista y su currículum "inusual" al ser padre de un "hijo natural" y "padre dominico", ha explicado.JUAN BAUTISTA MAÍNOOrganizada en ámbitos temáticos, la exposición ofrece un recorrido in crescendo a través de la evolución pictórica del artista que se inicia con obras de pequeño formato a las que siguen una serie de paisajes para continuar con la faceta retratista de Maino, donde destaca el Retablo de San Pedro Mártir en Toledo.JUAN BAUTISTA MAÍNOA continuación se exhiben las obras de gran formato de Maíno, con su obra más emblemática La recuperación de la Bahía de Brasil (1634-35) destinada a decorar el Salón de Reinos del Palacio del Buen Retiro.JUAN BAUTISTA MAÍNOCabe destacar también la Adoración de los Magos y la Adoración de los pastores, que se sitúan en las cotas más altas de la mejor pintura europea del momento, según su comisaria, remitiéndonos directamente a pintores como Savoldo, Caravaggio, Orazio Gentileschi o Guido Reni.JUAN BAUTISTA MAÍNOLa vinculación de Maíno con la corte le llegó gracias a su fama como excelente pintor y a su condición de dominico, y hacia 1620, cuando contaba 42 años, Felipe III lo llamó para que fuera maestro de dibujo del futuro Felipe IV. Por entonces, Maíno trabó amistad con Velázquez, a quién protegió y eligió en un concurso público para pintar el tema de La expulsión de los moriscos (hoy desaparecida)JUAN BAUTISTA MAÍNOFrente a rivales tan reputados como Carducho o Cajés. De esta época del pintor cercana a Velázquez data el Retrato de caballero (1618-23), adquirido por el Museo del Prado en 1936.JUAN BAUTISTA MAÍNO