El emblema de la ciudad, la diosa Cibeles, estrena alumbrado de la mano de los arquitectos Ben Busche e Isabel Barbas. La iluminación que se instalará alrededor de la fuente de está inspirada en los reflejos de las estalactitas de hielo. De Busche y Barbas es también el paseo de Recoletos.En la Plaza de Chueca se instarán con gran profusión unas alegres cintas de colores, propuesta del arquitecto Sergio Sebastián y Patricia de Miguel, que recuerda a las verbenas de pueblo. Las cintas serpentearán al capricho del viento.El diseñador gráfico Óscar Mariné, que se suma a la plantilla de artistas de la navidad madrileña, ha realizado para la Gran Vía una reflexión sobre el silencio y la calma... una Navidad blanca, clara y relajada al más puro estilo pop.Una cortina de luces diseñada por el modisto Ángel Schlesser se alterna con aros de bombillas blancas, doradas y ámbar que evocan racimos.En la Plaza de Tirso de Molina, gigantescos ojos abiertos, cerrados y guiñados sonríen a los peatones. Se trata de un proyecto de la arquitecta y diseñadora de interiores Teresa Sapey que versa sobre la mirada y las diferentes maneras de ver y vivir la vida.Una sucesión de perfiles de montaña -no, no es el Ibex 35- emergiendo del horizonte en la calle Mayor, recuerdo de la sierra que rodea la llanura de Madrid, es la propuesta del arquitecto Alberto Marcos para esta importante vía.Qué mejor para el alumbrado de la plaza falsamente llamada de la Luna -su nombre es Soledad Torres Acosta- que estos gatos y lunas. Es obra del diseñador gráfico Jacobo Pérez Enciso y una de las novedades de este año. Además de esta plaza y su entorno, se iluminan por primera vez las calles de Jorge Juan, Narváez, Carrera de San Jerónimo.David Delfín, otra de las novedades de este años, plantea una iluminación de la calle Jorge Juan muy sobria, a través de un diseño azul, sencillo y lineal, que genera una sensación de tranquilo dinamismo.El diseñador es otro de los fichajes de Gallardón para esta Navidad. El modisto, al que le ha correspondido la calle Ortega y Gasset, ha recreado la Navidad mediante elementos esféricos y curvas, en recuero de los copos de nieve y las bolas de los árboles.El paseo de Recoletos es obra de los arquitectos Ben Busche e Isabel Barbas, que han apostado por una explosión de colores en un tapiz o campo de flores primaveral.En este espacio se instalarán una serie de cúpulas luminosas que parecen colgar, ingrávidas, desde el cielo. Formarán un techo efímero de luz blanca, según la recreación de los arquitectos Ben Busche e Isabel Barbas.
