Los estampados de Lagerfeld no se elejan una pizca de los motivos geométricos, inspirados en la ropa alpina, con sus gruesos jerseys. Aquí se traslada a la chaqueta y el gorro, donde el gris y el marrón se dan el relevo y matizados con un broche dorado y un bolso color vino.Los grises, tonos invernales por antonomasia, aperecen en la colección para impregnar los bolsos y los abrigos. Se incorporan gruesos calcetines de lana, que de puro tupidos parecen livianos. Y las medias botas, en las que se mezcla piel y punto.En esta revisión de sus clásicos vestidos en blanco y negro, Chanel juega con los ribetes y los bolsillos. Los guantes que sugiere para el próximo invierno recuerdan al mito de la Gilda de Rita Hayworth, son siempre largos y sin dedos, tanto para mujer como para hombre.De las propuestas para hombre destacan los elementos de punto: guantes (sin dedos), bufanda e incluso corbatas, muchas veces conjuntados entre sí, con estampados siempre geométricos. En este caso se atreve incluso con una flor de lana a modo de broche colocado casi la altura del hombro.De vuelta al negro característico de la casa, esta vez se sugiere una falda deshilachada, corta, en gris y negra, coronada por un cinturón con un sensacional lazo; y de clazado una altísimas botas que suben muy por encima de la rodilla.Un sensacional traje plateado es una de las propuestas de noche incluidas en la colección. Tirantes cruzadas, un cuerpo drapeado y una fada vaporosa y transparente, todo ello en una sola pieza.Para las nieves de 2006, Lagerfeld propone no olvidar la primavera. Así, este conjunto de lana beige y rosa se completa con un iamginativo cinturón de cadenas plateadas y perlas de imitación con dos rosas de tela blanca, todo ello sobre una base de lentejuelas de reflejos fucsias.
