7 fotosAdiós a Juanito ValderramaAdiós a Juanito Valderrama 13 abr 2004 - 00:00CESTWhatsappFacebookTwitterBlueskyLinkedinCopiar enlaceMaría del Monte no pudo contener las lágrimas en su despedida al artista: "Ha sido un maestro, y si la maestría se mide por la humildad, él era un auténtico maestro, y si el ser grande se mide por ser humilde, él era el más grande; que no le quepa la menor duda a nadie".EFENumerosos representantes del mundo de la política han estado presentes en el adiós al artista, como el presidente de la Junta, Manuel Chaves, que acudió acompañado del consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías, y el portavoz del Gobierno andaluz, Enrique Cervera.EFEDolores Abril recibe el pésame del presentador televisivo Juan Imedio. También quisieron despedir al cantaor numerosos artistas flamencos como los hermanos Tate y Enrique Montoya, Los del Río, El Lebrijano, Josele, Paco Gandía, María del Monte, Carmen Sevilla, Cristina Hoyos, Pepe de Lucía y José de la Tomasa, entre otros.EFECayetana Fitz-James Stewart, Duquesa de Alba, y la esposa del torero Curro Romero, Carmen Tello, han acudido a dar su último adiós al cantaor Juanito Valderrama en la capilla ardiente instalada en la antigua Iglesia de San Luis de los Franceses en Sevilla.EFELa viuda del cantaor, Dolores Abril, acompañada de su hijo Juan y la novia de éste, permanecen ante el féretro del artista. Juanito Valderrama comenzó a trabajar cuando era apenas un adolescente con la Niña de la Puebla. Llevaba más de 70 años en los escenarios.EFELas cámaras de los periodistas rodean a la esposa de Valderrama a su llegada al templo sevillano donde se ha instalado la capilla ardiente. El cantaor dedicó su vida al arte y él mismo dijo en una ocasión: "No fumo, no bebo, tengo una técnica extraordinaria... Cantar bien a mi edad no lo ha hecho nadie. Lo mío es puro arte: con seis años ya decían que era un fenómeno y, sin medir 1,80 ni tener los ojos verdes, he llenado los teatros durante cuatro décadas".EFEEl féretro con los restos mortales del artista llega a la iglesia de San Luis de los Franceses en Sevilla. Detrás iban su viuda, Dolores Abril, arropada por su hijo, Juan Antonio Valderrama, y otros familiares. A su llegada al oratorio, centenares de personas que aguardaban en la calle arrancaron en aplausos.