El primer año de Gobierno de Boric en 10 claves
De la gran promesa del debut a la caída de la reforma tributaria, pasando por el rechazo a la nueva Constitución, estos son los momentos decisivos del comienzo del mandato
El debut del presidente Gabriel Boric, que asumió hace 12 meses con 36 años, estuvo marcado por una gran promesa de renovación política. Fue la llegada de una nueva generación de izquierda al poder, que generó altas expectativas. Pero el primer año de Gobierno ha sido complejo. La falta de experiencia de un equipo joven sin mayor conocimiento del trabajo en un Gobierno, que ha complicado varias carteras en diferentes momentos, se suma a la falta de mayorías en el Congreso, que dificulta el avance de sus propuestas.
Estos son los 10 momentos clave del primer año de una Administración que ha tenido que enmendar el rumbo varias veces, que enfrenta un segundo intento constitucional y graves problemas con su reforma estrella, la tributaria.
Un debut simbólico
El arribo al poder del presidente Boric estuvo cargado de simbolismos, que desplegó desde su primer día. El 11 de marzo prometió desempeñar el cargo “ante el pueblo y los pueblos de Chile” y debutó con un Gabinete cuyo promedio de edad era de 49 años, más que paritario: 14 mujeres entre 24 ministros. Por la tarde rompió el protocolo, cuando salió de La Moneda y se detuvo frente a la estatua del expresidente socialista Salvador Allende. En su primer discurso, frente a una multitud, se refirió a los pueblos originarios, “despojados de su tierra, pero nunca, nunca de su historia” y se comprometió con el proceso constitucional que estaba en curso: “Vamos a apoyar decididamente el trabajo de la convención. Necesitamos una Constitución que nos una”, dijo sobre el proceso que fracasó seis meses después. El Gobierno de Boric, en este primer año, ha estado marcado por sus discursos, por la conexión del presidente con los niños y otras señales: designó como ministra de Defensa a la nieta de Allende, Maya Fernández, justamente cuando este año se cumplen los 50 años del Golpe de Estado.
Ataque en la Araucanía
El 15 de marzo de 2022, solo cuatro días después de que asumiera el Gobierno, una comitiva encabezada por Izkia Siches –la primera mujer en a cargo del Ministerio del Interior y Seguridad Pública– fue atacada con disparos al aire, barricadas, cortes de ruta y mensajes de amedrentamiento en la comunidad mapuche Temucuicui, en La Araucanía, una zona donde ni siquiera puede entrar la policía. Es la región donde se vive el conflicto entre el Estado y el pueblo mapuche por las tierras ancestrales, que se ha intensificado consecutivamente desde fines de los noventa. En la campaña, el Gobierno había insistido que la respuesta frente a la violencia en esta zona, donde operan grupos radicales armados, sería el diálogo. En noviembre de 2022, Boric reconoció que esa primera visita de la ministra “fue un paso en falso, en donde pecamos de voluntarismo”. Este atentado definió, de paso, la suerte de Siches, que salió en septiembre del Gabinete.
Cierre de la fundición Ventanas
A casi cuatro meses de iniciado el Gobierno, el 27 de junio de 2022, Boric tomó una decisión que había sido postergada por administraciones anteriores: el cierre de la fundición Ventanas, que pertenece a Codelco, la cuprífera estatal. Ventanas está ubicada en Quintero, una zona costera a 116 kilómetros de Santiago que por décadas ha sido el ícono de la contaminación ambiental y de episodios de intoxicación. Días antes, y tal como lo señaló en su programa de Gobierno, el mandatario dijo que “hay que terminar con las zonas de sacrificio”.
Rechazo popular a la nueva Constitución
El 4 de septiembre de 2022, la ciudadanía rechazó por un 62% la propuesta de nueva Constitución de la convención constitucional. Fue un balde de agua fría para el Gobierno, que había apostado por su aprobación. Giorgio Jackson, que era ministro de la Secretaría de la Presidencia, y uno de los hombres más cercanos a Boric, lo dijo, incluso, antes de que se entregara el texto final: “Con la Constitución actual, muchas de nuestras reformas no se podrían llevar adelante”. La derrota se vivió como un plebiscito a su gestión y lo obligó a dar un giro hacia el ala moderada de su coalición y a liderar acuerdos con la oposición. En diciembre de 2022, un acuerdo político habilitó un segundo proceso constitucional, que arrancó el pasado el 6 de marzo.
El círculo íntimo sale del Gabinete
Apenas 48 horas después del rechazo a la nueva Constitución, Boric se vio obligado a renovar su Gabinete. Sacrificó a su círculo más íntimo, a sus ministros Izkia Siches y Giorgio Jackson, con quienes les une amistad desde que fueron dirigentes universitarios en 2011. Siches salió totalmente del Gobierno, mientras Jackson asumió en el Ministerio de Desarrollo Social. Fue un golpe a su generación política, pues le implicó dar un giro hacia la centroizquierda tradicional que, si bien era parte de su Administración, no estaba en el corazón político de La Moneda. Nombró en Interior a Carolina Tohá, en reemplazo de Siches, y a Ana Lya Uriarte en la Secretaría de la Presidencia, donde estaba Jackson. Fue el comienzo de una nueva etapa marcada por la influencia de la izquierda moderada.
La crisis de los indultos
El 30 de diciembre de 2022, Boric indultó a 13 condenados, 12 de ellos por delitos cometidos en el estallido social de octubre de 2019. Se desató un vendaval, sobre todo por el momento elegido: su ministra del Interior estaba cerca de llegar a un acuerdo con la oposición sobre seguridad pública, la mayor preocupación de la gente. La decisión del mandatario congeló las conversaciones en medio de la crisis en materia de delincuencia que vive Chile por el alza de homicidios y la irrupción del crimen organizado. Pero hubo otro factor que empeoró las cosas: el prontuario de algunos de los indultados. Uno de ellos, Luis Castillo, tenía antecedentes por delitos comunes previos a la revuelta. Ante ello, el presidente admitió que en el proceso hubo “desprolijidad”. La crisis forzó la renuncia de la ministra de Justicia, Marcela Ríos, y del jefe de Gabinete del mandatario, Matías Meza-Lopezhandía.
Críticas a Venezuela y Nicaragua
Durante una visita a Nueva York el 23 de septiembre de 2022, Boric dio un discurso en la Universidad de Columbia en el que insistió en sus críticas a las violaciones a los Derechos Humanos en Venezuela y Nicaragua. “Me enoja cuando eres de izquierda y puedes condenar las violaciones de derechos humanos en Yemen o en El Salvador, pero no puedes hablar de Venezuela o Nicaragua… o Chile”, dijo. Boric gobierna con una coalición de izquierda y su postura sobre Venezuela lo ha enfrentado con el ala más extrema, el Partido Comunista. En febrero de 2023, el mandatario volvió a la carga contra los regímenes autoritarios de América Latina. Cuestionó a Nicaragua y calificó de “dictador” a Daniel Ortega.
Un 35% de aprobación pública
Cuando Boric asumió, gozaba del 50% de popularidad de acuerdo a la encuesta Cadem. Pero, a menos de dos meses, según el mismo sondeo, que toma el pulso semanal, cayó a 36%. Su punto más bajo fue el 15 de enero de 2023, cuando tuvo una aprobación del 27% y una desaprobación del 70%. El área donde generó más rechazo su gestión, con un 53%, fue el manejo de la delincuencia y el orden público. Pesaron los indultos a los condenados por la revuelta social: un 72% se mostró en desacuerdo. El 5 marzo pasado, sin embargo, a días de cumplir su primer año en La Moneda, su aprobación subió al 35%, en una tendencia al alza que no se sabe si mantendrá.
Superávit fiscal tras 10 años
Fue una buena noticia la que dio el 31 de enero el ministro de Hacienda, Mario Marcel, cuando entregó el resumen de la ejecución del Presupuesto fiscal 2022: el gasto público cayó en Chile más del 23% el año pasado, por lo que se logró superávit por primera vez en una década. Militante socialista y figura de la izquierda tradicional del Gobierno de Boric, Marcel es el mejor de valorado del Gabinete junto a Tohá.
Rechazo legislativo a la reforma tributaria
A tres días de cumplir un año en La Moneda, el gobierno de Boric sufrió el mayor golpe legislativo de su periodo, cuando la Cámara de Diputados rechazó la reforma tributaria en su primera valla legislativa. Fue una fuerte derrota para la Administración izquierdista y para el ministro Mario Marcel. La reforma era un pilar clave para financiar su programa: pretendía recaudar un 3,6% del PIB en cuatro años (unos 10.000 millones de dólares). En su intervención del miércoles, el mandatario enumeró la batería de medidas que quedarán inconclusas, como el aumento de la pensión garantizada universal, PGU, equivalente a unos 310 dólares.
Suscríbase aquí a la newsletter de EL PAÍS América y reciba todas las claves normativas de la actualidad de la región.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.