Calvet asegura el impulso del tranvía en la costa de Tarragona

La puesta en marcha de la variante ferroviaria de Vandellòs, el mes pasado, provocó el abandono de la línea que discurre por la costa de Tarragona, y el consecuente cierre de estaciones en Salou y en el centro de Cambrils. Quedaron sin servicio los más de 600.000 usuarios que las usaban anualmente. Desde entonces, para ir en tren desde Salou a Barcelona la única opción es coger un autobús hasta el apeadero de Port Aventura y, desde ahí, viajar a Tarragona para hacer un transbordo. Colectivos de usuarios y plataformas de defensa del transporte público han criticado de manera insistente la pérdida de servicios y la Generalitat ha reaccionado recuperando la idea de poner en marcha un tranvía para cubrir la línea. "La variante de Vandellòs ha hecho obligatorio reconfigurar los servicios pero tenemos que hacer algo con la línea de la costa", admitió Calvet este lunes en comisión parlamentaria. El consejero avanzó que se han adjudicado los estudios informativos para las obras y añadió que la previsión con que trabaja la Generalitat es que la entrada en funcionamiento del Tren-Tram se produzca entre 2024 y 2025. Calvet descarga en Adif las responsabilidades sobre el factor tiempo, detallando que el despliegue del trazado del tranvía debe ir "acompasado" a los trabajos de desmantelamiento de la actual infraestructura. Adif, por su parte, sacó a licitación hace dos semanas el desmantelamiento de las vías y el desmontaje y traslado de los postes de catenaria. Todo el tramo consta de 28 kilómetros.

La puesta en marcha de la variante de Vandellòs también tuvo afectación en el tráfico de trenes entre las Terres de l'Ebre y Barcelona. Los Euromed ya no paran en la estación de l'Aldea y Renfe ha puesto en servicio un Avant que permite hacer el recorrido en, supuestamente, hora y media escasa. Este lunes fue el estreno del nuevo tren, con 55 pasajeros a bordo.