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Política internacional en un bando municipal: Almeida dice que en Chile hay “un irracional furor destructivo”

El alcalde define Madrid como "lugar de acogida para quienes buscan libertad, paz y prosperidad" en plena crisis de los refugiados y pide a los ciudadanos que elijan "transporte menos contaminante"

V. torres
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, durante su intervención en un coloquio del Club Siglo XXI.
El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, durante su intervención en un coloquio del Club Siglo XXI.Eduardo Parra (Europa Press)

El alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, ha emitido este domingo un edicto con motivo de la celebración de la XXV Conferencia de Naciones Unidas sobre cambio climático, que iba a celebrarse en Santiago de Chile pero que acogerá Madrid debido a la grave crisis social y política por la que atraviesa el país latinoamericano. En su carta a los madrileños, califica de "irracional furor destructivo" el tsunami del pueblo chileno contra la desigualdad, al tiempo que presenta a la capital como "lugar de acogida para quienes buscan libertad, paz y prosperidad" en plena crisis de los refugiados. Además, pide a los ciudadanos que elijan "transporte menos contaminante" y se arroga el título de Madrid Green Capital, un juego de palabras con el European Green Capital, título que Madrid no tiene. [Consulta el bando completo en PDF].

El alcalde empieza afirmando que las "reivindicaciones de los santiaguinos", en las que no se detiene pero que van desde la mecha inicial por el alza en las tarifas del transporte público a razones más de fondo, como el precio coste de la vida, las bajas pensiones, el alto coste de medicamentos y tratamientos médicos y un profundo descrédito institucional, "han sido usurpadas e instrumentalizadas por gentes que no entienden otro lenguaje que el de la violencia". "Los desórdenes han llegado en su sinrazón a cobrarse varias vidas humanas y a profanar y destruir lugares de culto; y se han ido extendiendo por otras ciudades, perjudicando gravemente a los chilenos", remacha el alcalde.

Almeida no hace referencia alguna a las denuncias de graves violaciones de los derechos humanos en la represión de la llamada Primavera chilena, una protesta masiva en la que participa un amplio espectro social que va desde la clase baja a la media. El Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) del país cifra en 7.259 las detenciones hasta el 25 de noviembre y en 2.808 los heridos atendidos en los hospitales durante el estallido de descontento social, 232 con heridas oculares severas. 

"La escandalosa respuesta de las fuerzas de seguridad han dejado ya un saldo de cinco personas muertas a manos de agentes del Estado. La Fiscalía ha registrado más de 1.100 denuncias por tortura y tratos crueles, inhumanos o degradantes además de, al menos, 70 delitos de carácter sexual cometidos por agentes de seguridad", denuncia por su parte Amnistía Internacional Chile sobre una represión policial que diarios como The Guardian califican de "carnicería".

Además de estas consideraciones políticas, el bando hace otras de carácter social: define Madrid como "lugar de acogida para quienes buscan libertad, paz y prosperidad". "Ser madrileño es sinónimo de ser generoso, desprendido y proclive a socorrer a quienes más lo necesitan, especialmente a quienes son víctimas de la sinrazón y de la violencia arbitraria", dice el alcalde en plena crisis de los refugiados frente a la sede del Samur Social, con familias con niños durmiendo desde hace meses en la calle.

Y también se suma a la lucha ecologista. Almeida, al que dos jueces han obligado a mantener la zona de bajas emisiones de Madrid Central por "la salud y el medio ambiente", pide a los madrileños, entre otras recomendaciones para cuidar el medio ambiente, que elijan "el medio de transporte menos contaminante para cada trayecto". "En definitiva, que hagáis visible el firme compromiso del pueblo de Madrid con la sostenibilidad y el cuidado de nuestro medio ambiente", señala el regidor, que además de rebajar las condiciones de acceso a Madrid Central, ha abierto la veda a desmantelar los carriles bici de la capital.

En este punto, Almeida anima a participar en "las más de cien actividades que el Ayuntamiento de Madrid" organiza hasta el 14 de diciembre, un programa de talleres, charlas, conciertos, paseos guiados o debates que han bautizado Madrid Green Capital. Para nombrar esta campaña, Madrid juega al equívoco con el nombre de un distintivo verde europeo que no tiene. Se trata del European Green Capital, un reconocimiento a las ciudades medioambientalmente sostenibles que otorga desde 2010 la Comisión Europea. 

En 2019, la European Green Capital es Oslo y el año que viene lo será Lisboa, tras pasar por HamburgoCopenhague, Bristol y Nates. Solo una ciudad española fue European Green Capital, Vitoria, que lo logró en 2012. Santander y Zaragoza lo intentaron en 2013 y Barcelona llegó a ser finalista en la misma edición que ganó la capital vasca. Madrid nunca se ha presentado. Además de del programa actividades y de un vídeo promocional, el Ayuntamiento ha forrado las calles de carteles con el lema Madrid Green Capital y en la Puerta de Alcalá hay un gran rótulo con hojas secas entre las luces navideñas.  

Paco Segura, portavoz de Ecologistas en Acción, es un caso flagrante de greenwashing o verdeamiento. Segura tilda de "cinismo apabullante" que el alcalde quiera presentarse como defensor del medio ambiente. "Es una vergüenza que ahora de pronto trate de pintarse de verde un Gobierno que hace dos semanas estaba desmontando carriles bici, que su primera acción de gobierno fuera tratar de suprimir las multas de Madrid Central con un pretexto burdo que era una falacia y que no para de tratar de dar más facilidades al coche", denuncia. Ecologistas recuerda al alcalde que es de "una desfachatez impresionante" usar un "título registrado y reglado de la Unión Europea" como es el de European Green Capital

Preguntado el Ayuntamiento sobre si considera que existe una apropiación del término European Green Capital, fuentes municipales aseguran que "conceptos como ‘Green Capital’, ‘Blue Sky’, ‘Clean Air’, ‘Open City’ o ‘Ciudad Abierta’ no son propiedad de nadie" y añaden que lo importante es la "organización de un programa previo a la Cumbre con más de un centenar de actividades que giran en torno a la naturaleza y al cuidado del medio ambiente".

Desde la oposición, Más Madrid ha reclamado en un comunicado la retirada del bando por sus comentarios sobre Chile, ya que a su juicio es "extremadamente grave que se utilice un bando municipal" para verter opiniones personales sobre política internacional. En este sentido, recuerda al alcalde que "las relaciones internacionales son competencia en exclusiva del Gobierno de España".

Más Madrid considera "inaudito que el alcalde se comporte como un tertuliano y haga este tipo de declaraciones en un bando", que recuerda que es "un espacio reservado para manifestaciones solemnes". "Si el ayuntamiento de Madrid quiere posicionarse sobre los asuntos de otro país debe hacerlo tras pasar por el pleno", exige el grupo de Rita Maestre y Marta Higueras.

El grupo municipal critica el "poco nivel" del resto del texto, que revela a su juicio "el poco entusiasmo que esta cita genera en el gobierno municipal". Según el edil de Más Madrid Miguel Montejo, el bando "insulta al 83,6% de los chilenos en general y al 72,3% de los chilenos de derechas".

El grupo municipal socialista también ha censurado el contenido del bando. Pepu Hernández coincide con Más Madrid en que "no es el marco adecuado para expresar una opinión política que, como alcalde, debería reservar para otros foros", máxime cuando "ni le corresponde por cargo, ni representa la opinión de los madrileños". El alcalde, que ha aprovechado la "proyección internacional" que le otorga el momento, "nuevamente olvida que debe representar a toda la ciudadanía, no solo a sus compañeros de partido", continúa Hernández, para quien el texto institucional "debería haberse ceñido a saludar a los visitantes de la Cumbre y a llamar a los madrileños y madrileñas a convertirse en excelentes anfitriones".

Mientras "se excede en lo político", Almeida "se limita en lo medioambiental, que debería ser la parte importante". Hernández opina que "contradice con sus palabras su acción de gobierno". "Pide que usemos el transporte público pero permite el deterioro de los autobuses municipales, menciona la conservación de los parques y jardines pero promueve la entrada de miles de coches en la almendra central".  "Ojalá esta Cumbre sirva también para tomar decisiones valientes contra la emergencia climática", concluye. "Nos reiteramos en su contenido", afirman fuentes municipales frente a las críticas. Preguntada su opinión sobre el bando, Ciudadanos no ha contestado por el momento.

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Sobre la firma

V. torres
Redactora de la sección de Madrid, también cubre la información meteorológica. Licenciada en Periodismo por la Universidad de Navarra, cursó el máster Relaciones Internacionales y los países del Sur en la UCM. En EL PAÍS desde el año 2000, donde ha pasado por portada web, última hora y redes, además de ser profesora de su escuela entre 2007 y 2014.

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