El comité de empresa de Ford en Europa pide estudios de viabilidad para la factoría de Almussafes
La multinacional del automóvil anunció en octubre el traslado a Norteamérica de la nueva generación de motores EcoBoost 2.0 y 2.3 que actualmente fabrica la planta valenciana
El comité de empresa europeo de la multinacional automovilística Ford reclama estudios concretos que ofrezcan viabilidad para la planta de Almussafes (Valencia), y espera que se considere a la factoría española para fabricar los actuales y futuros motores híbridos dirigidos al mercado europeo.
En una resolución pactada previamente por los sindicatos de la planta valenciana, el órgano sindical reacciona así a la decisión de la compañía automovilística de adjudicar la nueva generación de motores EcoBoost a plantas de Norteamérica a partir de 2022 "en detrimento" de la factoría de Ford España.
El escrito, aprobado por unanimidad este jueves en Colonia por el comité, lamenta que hayan prevalecido "criterios políticos por encima de los económicos", con el argumento de acercar la fabricación de motores a la producción de vehículos para eliminar la creciente incertidumbre de costes de transporte, aranceles y tipo de cambio.
La representación sindical espera que por razones de rentabilidad para el negocio se considere la planta valenciana para fabricar los actuales y futuros motores híbridos para el mercado europeo, muchos de los cuales se importan actualmente de fuera de Europa y se ensamblan en plantas europeas.
El comité europeo y el de Valencia piden estudios que respondan cuanto antes a las propuestas que plantean y se pueda establecer un plan de seguimiento para esas alternativas.
Lo resolución recuerda que durante más de 40 años la planta de motores de Valencia ha demostrado su "profesionalidad, eficiencia y compromiso" con los retos que se han planteado por parte de la compañía y es un referente en todos los ámbitos para Ford.
Y "seguirá siendo así en el caso de que se haga realidad alguna alternativa para Valencia", como así lo recoge el comunicado en el que Ford anunció el traslado de la fabricación de los motores EcoBoost.
Añade que la flexibilidad de la plantilla y de las instalaciones de la planta de Valencia demuestran la capacidad de negociación y adaptación a las necesidades en cada momento, a lo que se une la rentabilidad económica, y todo ello es "una garantía" para el rediseño de negocio que Ford acometerá durante los próximos años.
Los representantes sindicales reafirman su compromiso de concentrarse en satisfacer la demanda extraordinaria de motores para el mercado norteamericano y que el lanzamiento del nuevo Kuga sea "un éxito".
El presidente de Ford en Europa, Stuart Rowley, aseguró a mediados de septiembre que los recortes de plantilla en Almussafes, la segunda mayor de la multinacional estadounidense en Europa, sería limitada tras los ajustes diseñados por la compañía. “Habrá unas pocas reducciones en Valencia”, sostuvo entonces, a la vez que defendió el futuro de la planta valenciana.
El presidente de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, ha insistido, tras conocer la demanda de los sindicatos, que en la planta de Almussafes "se han hecho las cosas muy bien", es la que tiene mayor nivel de productividad de todas las fábricas europeas y, por tanto, está convencido de que "va a tener nuevas oportunidades".
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