Tardà habla en la Universitat de València entre un fuerte dispositivo policial por las amenazas ultras

Un fuerte dispositivo policial en el campus de Tarongers de la Universitat de València ha separado esta tarde a una treintena de manifestantes ultras de un grupo mucho más numeroso de estudiantes y antifascistas. Esta insólita escena en la institución académica se ha producido con motivo de las pintadas nazis y amenazas de muerte proferidas desde este fin de semana por la extrema derecha contra la participación de Joan Tardà, exportavoz en el Congreso de Esquerra Republicana de Catalunya, en una mesa redonda. El debate Drets i llibertats a l'Estat Espanyol, organizado por el sindicato estudiantil BEA y las juventudes de Esquerra Jovent Republicà, se ha celebrado este lunes en el interior de la Biblioteca Gregorio Maians sin ningún incidente. Fuera, en la explanada, el cordón policial aislaba a la concentración ultra, entre cuyos integrantes había miembros de España 2000.

Tardà ha puesto como ejemplo el "atrezo" de estas pintadas (Muerte a Tardà, Empieza la caza) para lamentar la "anomalía desde hace muchos años" y la "poca calidad democrática" en España, en este caso "en el palacio del saber que es una universidad, incluso con protección policial". "Aun así, estamos convencidos de que siempre se acaba imponiendo la razón, la inteligencia y el espíritu democrático", ha remarcado.

Desde este punto de vista, ha advertido que "los que quieren imponer el miedo saben que nunca van a ganar", pues "la democracia siempre acaba venciendo", y ha llamado a que evolucione a un escenario en el que "sea posible construir el diálogo, la negociación y finalmente el acuerdo". Tardà ha hecho estas declaraciones a los medios de comunicación antes de su intervención en el acto en el que también han participado el profesor de Sociología, Rafael Xambó, y la representante estudiantil de Jovent Republicà, Núria Marín.

El veterano exdiputado, que no se presenta en las próximas elecciones, ha defendido que el derecho de autodeterminación va más allá de Cataluña y debe incluir "todas las ansias que puedan existir en el País Valencià y les Illes Balears", pero "dentro de la normalidad democrática".

"Nunca vamos a abandonar la bandera del diálogo", ha aseverado, lamentando que haya alguien "interesado" en convertir el conflicto independentista en "un problema de orden público" con los disturbios en Cataluña tras la condena del Tribunal Supremo a los líderes del 'procés'.

Tardà ha asegurado que no entiende las críticas del presidente de la Generalitat y líder del PSPV, Ximo Puig, que exigió a su homólogo catalán, Quim Torra, que "deje tranquilos a los valencianos cuando esté hablando de sus ansias soberanistas". Ha enmarcado la postura de Puig en la campaña de las elecciones del 10 de noviembre, pues ambos comparten "respeto y buena relación recíproca". "Sé perfectamente que él entiende nuestra postura, otra cosa es que lo exprese públicamente", ha aseverado, recalcando que Esquerra Republicana del País Valencià "es un partido tan legítimo, democrático y valenciano como el suyo".

Respecto al papel de Torra al frente de la Generalitat, ha afirmado que es el presidente de su gobierno de coalición, del que ERC se siente "corresponsable". "Lo que haga Torra es algo que comparto, más allá de las opiniones personales", ha asegurado, reconociendo que "a nadie se les escapa que pueden existir miradas distintas" en el independentismo.

Por su parte, Rafael Xambó ha analizado sucintamente la posición con respecto al conflicto en Cataluña de los principales medios de comunicación escritos en 2010, 2012 y 2017. Ha sostenido que ha habido una gran polarización y una "profunda degradación del sistema comunicativo español", en referencia también a las televisiones.