La juez retira la patria potestad de sus dos hijos al acusado del triple crimen de Valga
José Luis Abet regresa al juzgado para que la instructora le notifique la medida y mantiene su silencio
La juez de violencia de género de Caldas de Reis ha acordado este miércoles retirar la patria potestad de sus dos hijos menores a José Luis Abet Lafuente, el hombre que se confesó autor de los disparos que en la mañana de este lunes acabaron con la vida de su expareja, la hermana de esta y la madre de ambas en la localidad pontevedresa de Valga, y por lo que horas antes ingresó en prisión por el triple asesinato.
El hombre ha abandonado la prisión de A Lama durante unas horas para acudir al juzgado donde se le comunicó esta diligencia. La instructora todavía no ha tomado ninguna decisión sobre la custodia de los pequeños de 4 y 7 años de edad que permanecen con un familiar directo de su madre fallecida, según informaron fuentes del Tribunal Superior de Xustiza de Galicia.
El juzgado también ha realizado este miércoles la exploración de los menores, un trámite en el que intervienen un grupo de expertos para valorar la situación personal y familiar de los niños y que evitaría que tengan que declarar en el juicio con jurado popular en el que desembocará el proceso. Los pequeños presenciaron como su padre disparó a su madre cuando esta los había metido en el coche para que fueran al colegio.
Los niños fueron rescatados por un vecino cuando este escuchó los disparos y permanecieron en casa de otro hasta que se acordó que provisionalmente permanecieran con el hermano de su abuela, una decisión tomada de forma conjunta por la juez, los servicios sociales municipales y el equipo de menores de la Xunta.
Abet, que rechazó declarar este martes en el juzgado porque, según dijo, no se encontraba "preparado" para hacerlo, tendrá que participar en la reconstrucción de los hechos aunque la fecha de esta diligencia no ha trascendido todavía. En el auto de prisión la juez, en consonancia con el criterio de la Fiscalía de Pontevedra, le imputa tres delitos de asesinato con premeditación y planificación de los hechos por los que se enfrenta a la máxima condena de prisión permanente revisable.
El detenido de 41 años residía últimamente con su familia en Ames (A Coruña). La pareja se había divorciado en enero de 2018 pero compartían la custodia de los hijos. Cuando salió de trabajar del turno de noche, el hombre se dirigió a la casa y disparó a las tres mujeres con un revólver del calibre 32 que luego arrojó junto a una caja de munición al río Tambre. Después fue a su domicilio y desde allí llamó a la Guardia Civil para confesar los crímenes. El arma fue recuperada al desvelar Abet a los agentes el punto exacto donde la había tirado, aunque no concretó cómo y cuándo la había adquirido, una cuestión que se encuentra bajo investigación.
