Temporada Alta revisa los clásicos y reflexiona sobre la condición humana

Los directores Thomas Ostermeier y Oskaras Korsunovas vuelven a Temporada Alta acompañados de otros artistas internacionales, nuevos y consagrados, como Tiago Rodrigues, Alessandro Serra o Dada Masilo. La Programación de la 28 ª edición del Festival presentará entre el 6 de octubre y el 9 de diciembre un total de 223 funciones de 96 espectáculos procedentes de 7 países diferentes. Este año, apunta el director del festival, Salvador Sunyer, "se ha apostado por espectáculos que invitan a la reflexión y a repensar de dónde venimos, dónde estamos y cuáles son los retos de futuro que nos debemos plantear como sociedad".

Un doble programa de Shakespeare de carácter internacional será el encargado de inaugurar el festival el 11 de octubre en los Teatros Municipales de Girona y Salt. En Girona, la Royal Shakespeare Company, dirigida por Gregory Doran, vuelve a España y a Temporada Alta después de quince años con su Measure for measure. "Una mirada sobre el tema de la justicia donde el que administra hace de ella un poco lo que quiere, una cosa que os sonará y de nuestros días que ya recoge Shakespeare", apunta Sunyer. Salt se estrenará con Macbettu, una obra sobre el poder que llega de la mano de uno de los directores más personales de la escena italiana, Alessandro Serra. Será el primer espectáculo de la historia del festival en sardo.

Esta doble inauguración dará paso a una programación que reúne 27 montajes internacionales, 25 producciones y co-producciones, una treintena de obras de creación contemporánea y 56 de dramaturgia catalana. "Con ellos reivindicamos los clásicos y creemos que no hay nada tan contemporáneo como los clásicos", sostiene el director. El festival ha escogido obras que reviven textos universales de Shakespeare, Rodoreda, Pinter, Lorca, Bertrana o Zweig y también otras que tratan sobre la condición humana, a menudo desde una lectura más contemporánea como O agora que demora, que habla de la inmigración a partir del texto de la Odissea de Homero , de la brasileña Christiane Jatahy. Entre las coproducciones, algunas con dramaturgos y directores internacionales como la misma Jatahy o Angélica Liddell.

Para Sunyer, "es positivo que los artistas ofrezcan miradas sobre qué está pasando". Así, Suite Toc núm.6 de Les Impuxibles es una mirada a una enfermedad o disfunción mental y como afecta a la vida y Jerusalem, de Pere Arquillué, estrenada en el Grec, retrata un mundo de gente excluida. Claudio Tolcachir, uno de los habituales en Girona, aborará la relación virtual entre una pareja de hombres en Próximo y Europa Bull, de Jordi Oriol, mostrará qué pasa en Europa. "Estarán todos los temas que nos toca vivir", mantiene, el feminismo, la prostitución, la pornografía, la democracia, la depresión, la muerte o la soledad. Cree que es lo que debe hacer una programación artística, "enseñar mundos diferentes".

Thomas Ostermeier presenta Retour a Reïms, a partir del best seller sociológico y autobiográfico de Didier Eribon, en el que se analiza cómo puede ser que en este momento quien vota a la extrema derecha, a los partidos de populismo primario, sea precisamente la gente más maltratada de la sociedad que antes votaba a la izquierda. Korsunovas abordará la burocracia y los fakes y como se usa la mentira para cambiar a las personas y las sociedades. Recomendado como "extraordinariamente bueno", Tiago Rodrígues llega con Sopro, un espectáculo sobre las personas que están en el mundo del teatro.

Lluís Pasqual estrenará en Cataluña el Romancero Gitano de Lorca y, tras convertirse en todo un fenómeno en la cartelera madrileña, se verá en Girona Iphigenia en Vallecas, de Antonio C. Guijosa. La danza traerá también El amor brujo de Manuel de Falla con Israel Galván.

Temporada Alta sigue con el proyecto europeo Pyrenart, y con su conexión con Sudamérica y estrena Arteria una nueva iniciativa del festival para facilitar el acceso al teatro de los menores de 30 años, adaptándose a sus gustos e intereses. En el apartado musical destacan dos mujeres referentes en sus ámbitos, Jane Birkin y la cubana Omara Portuondo; además de la navarra Amaia, los Manel, Joan Dausà, el Petit de cal Eril o Judith Neddermann.

El presupuesto, de 3.247.500 euros, unos 150.000 más que en la anterior edición, tiene su mayor partida en los 840.000 euros de los patrocinadores y como ya hizo el año pasado cuenta con una aportación del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM) de 45.000 euros, 15.000 más que en 2018.

<NO1>La Consellera de Cultura, Maria Àngela Vilallonga, que ha definido el Festival "muy a la medida de esta consellera que reivindica los clásicos tanto llatins como renacentistas y contemporáneos, como Mercè Rodoreda, Aurora Bertrana, Verdaguer y Maria Àngels Anglada", ha sostenido que la Conselleria de Cultura "apoya y continuará apoyando a Temporada Alta", y a su "programación de excelencia". También ha destacado la importancia que se hagan representaciones en 8 localidades.